En la búsqueda de la efectividad
Por Mariam Ludim Rosa Vélez
mariamludim@uprm.edu
PRENSA RUM

viernes, 1 de junio de 2007

¿Sabemos si nuestros estudiantes están aprendiendo? Esa precisamente es la interrogante que aspiran contestar en la Oficina de Avalúo y Mejoramiento Continuo de la facultad de Artes y Ciencias del Recinto Universitario de Mayagüez. El organismo busca criterios para evaluar las destrezas adquiridas por los universitarios durante su trayectoria educativa, sostuvo el doctor Mario Núñez, decano asociado de Avalúo y Tecnologías de Aprendizaje y director de la entidad también conocida como Oficina A+.

Explicó que los 13 departamentos de la mencionada facultad cuentan con coordinadores de avalúo que -en armonía con el equipo de trabajo de la oficina que dirige compuesta por los doctores Vivian Navas y Eddie Marrero- identifican áreas en las que se pueden mejorar y ser más efectivos. De hecho, esa selección constituye el primer paso para un ciclo de avalúo.

“El cierre de un ciclo de avalúo conlleva básicamente los siguientes pasos: identificar un objetivo de aprendizaje que esté contemplado en el perfil del egresado del departamento y que no se esté alcanzando satisfactoriamente; medir el status actual de los estudiantes en cuanto a ese objetivo; idear e implementar una intervención que atienda la deficiencia identificada; medir el efecto de la intervención y finalmente trazar un plan de acción basado en los resultados obtenidos”, explicó, por su parte, la doctora Navas.

Agregó que los criterios a evaluarse pueden ser de contenido (cuánto sabe el estudiante del concepto) o una destreza. Por ejemplo, en el más reciente ciclo el departamento de Biología eligió identificar a través de un examen de contenido los conceptos erróneos sobre la materia que traen los estudiantes al tomar el curso básico. Se hizo entonces un preprueba suministrada antes de comenzar el curso y una post prueba antes de finalizado con el objetivo de tomar acción correctiva, señaló Navas.

Ya la facultad ha completado dos cierres de ciclos de avalúo. En el más reciente, que concluyó el pasado semestre, se evaluaron criterios como habilidades de comunicación, escritura, documentación de informes de laboratorios y efectividad curricular, entre otros.

“El modelo ha sido muy efectivo porque ha apoderado a los departamentos y a los profesores de los procesos y han visto esto como algo externo que no se impone. Uno de lo elementos principales y lo que implica tener éxito en avalúo del aprendizaje es que esto se vea como parte de las tareas que cada uno de los profesores tiene que llevar a cabo”, enfatizó Núñez.

Mencionó que otra de las ventajas del proceso es que se han desarrollado una serie de instrumentos que se pueden utilizar para otros proyectos. Están disponibles en el portal http://uprm.info/avaluo.

“Al comparar este ciclo con el anterior, es notable el efecto del aprendizaje. Entre los aspectos más significativos que denotan madurez en el proceso están: mayor agilidad y efectividad identificando el tema que se desea avaluar; medidas de preintervención más efectivas (incluyendo el desarrollo de instrumentos de medición propios y el uso efectivo de rúbricas); versatilidad y efectividad en el tipo de intervención utilizada (sobretodo, que se responda al tema seleccionado y a la población impactada); análisis e interpretación adecuada de los resultados; y, tomar acciones pertinentes en función de los resultados”, dijo el director de la Oficina A+.

El catedrático añadió que ya los departamentos de Artes y Ciencias han identificado los criterios que evaluarán durante el siguiente ciclo que comienza en agosto de 2007.


La revista de avalúo

El diseño y arte de portada de la revista Avalúo Plus es del artista Oliver Bencosme.
Por otra parte, también durante el mes de agosto se publicará la segunda edición de la revista Avalúo Plus que tiene como fin divulgar el quehacer relacionado al avalúo.

“Es una de las formas de diseminar y compartir lo que se ha encontrado. Es una revista revisada por pares en la que se publican los resultados de los proyectos. Está publicada bajo la licencia Creative Commons, lo que permite compartir la información”, indicó Núñez.

Su primera edición se circuló en octubre de 2006 y participaron los doctores Eduardo A. Kicinski, Fernando Gilbes Santaella, Elsa Arroyo Vázquez, Carmen Rivera Villegas, Eddie Marrero Irizarry, Elba Vargas y Julio C. Quintana Díaz.

La revista está también disponible en formato digital en el sitio http://uprm.info/avaluoplus.

Finalmente, Navas indicó que estos cierres del ciclo de avalúo constituyen la puesta en marcha de la recomendación hecha por la Middle State Comission on Higher Education (MSCHE), a raíz de su visita de acreditación realizada en abril de 2005. En ese momento, la MSCHE pasó juicio sobre 14 estándares de acreditación de los cuales dos eran nuevos: implementación de planes de avalúo administrativos y del aprendizaje del estudiante.

“Desde su formación, esta oficina ha tenido en mente dos objetivos fundamentales: en cuanto a la implementación de los planes de avalúo del aprendizaje y la institucionalización de una cultura de avalúo del aprendizaje en la facultad de Artes y Ciencias. El segundo debe ser intrínseco al primero, así como el constatarse la continuación y ampliación de prácticas de avalúo aun después del informe a la MSCHE”, concluyó.


Desde la izquierda los doctores Vivian Navas, Eddie Marrero y Mario Núñez de la Oficina de Avalúo y Mejoramiento Continuo de la facultad de Artes y Ciencias durante el primer cierre de ciclo de avalúo.


Parte de los directores de departamento de participaron en el segundo cierre de ciclo que se llevó a cabo en la Sala Eugene Francis.


El rector Jorge Iván Vélez Arocho también asistió a la actividad que se efectuó a principios del semestre pasado.

Fotos: Suministradas