Décimo aniversario de la Colección
Álvarez Nazario

Por Idem Osorio y Alessandra Otero
prensa@uprm.edu
PRENSA RUM

viernes, 16 de noviembre de 2007

“Mi esposa y yo tenemos el honor de donar a esta
Universidad nuestra biblioteca personal de
hispanística, la que hemos ido reuniendo con
mucho amor a través de los años”.
Manuel Álvarez Nazario

La Colección contiene unos seis mil títulos.
Una visita a la Colección Álvarez Nazario de la Biblioteca General del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) trasciende la entrada a un espacio frío y repleto de libros. Allí los textos, objetos y recuerdos transmiten la calidad humana y la vocación educadora de quienes forjaron y, más tarde dejaron como legado, un tesoro cultural.

De lo anterior dieron fe varios discípulos, colegas y amigos de los doctores Manuel Álvarez Nazario y Josefina Rivera de Álvarez, ambos profesores eméritos del RUM, quienes donaron su biblioteca personal y los objetos que la habitaban para conformar hace diez años una colección especializada en lingüística, gramática y literatura puertorriqueña, española e hispanoamericana.

A lo largo de su trayectoria, la Sala se ha convertido en un centro de investigación literaria que sirve a diversas entidades educativas y también en escenario de un sinnúmero de actividades del quehacer artístico. El cuidado de este acervo cultural ha recaído en las manos de María del Carmen Pérez, quien ha sido su custodia desde que se instaló la Sala en 1997.

Con motivo del décimo aniversario de este legado, se realizaron dos eventos el pasado 23 y 25 de octubre de 2007 en los que se exaltaron las aportaciones del dúo que aparte de formar un matrimonio, logró enlazar los campos de la literatura y la lingüística. Tanto la Biblioteca General, como el departamento de Estudios Hispánicos y el Centro de Publicaciones Acádemicas (CePA) unieron esfuerzos para la organización de estos actos.

“Hace un mes tuve la oportunidad de venir a la Sala y se siente una paz cuando uno entra aquí, éste es un lugar muy especial. Nos llena de orgullo que lleve el nombre de dos distinguidos claustrales. Esa labor erudita de ellos fue la que le dio mérito y distinción a ambos profesores del Recinto”, precisó la doctora Mildred Chaparro, decana de Asuntos Académicos, quien representó al Rector del RUM en la apertura.

Por su parte, el director de Estudios Hispánicos, doctor Jaime Martell, resaltó la figura de Álvarez Nazario por ser quien fundó y dirigió por una década ese departamento en el Recinto desde 1956 al 1966. De igual forma, destacó su aportación junto a la doctora Rivera al acervo lingüístico y literario dentro de la tradición académica.

“Resultan por nuestra historia universitaria el más significativo ícono del matrimonio entre la lengua y la literatura. La unión de ambos representa esa relación y emblematiza lo que debe ser todo departamento de Estudios Hispánicos o de Lenguas y Literatura”, aseveró.

El doctor Álvarez Nazario, quien murió en el 2001, se destacó en los campos de la filología y la lingüística, aparte de su incansable carrera como educador y catedrático. Sus obras cumbres incluyen análisis sobre las influencias del arcaísmo vulgar, el elemento canario, afronegroide y el influjo indígena en el español de Puerto Rico, aparte de ser autor de numerosos libros y ensayos.

Por su lado, la doctora Rivera es considerada una de las historiadoras más importantes de las letras puertorriqueñas, además de su rol de escritora y educadora. Su Diccionario de Literatura Puertorriqueña e Historia de la Literatura Puertorriqueña son obras de referencia indispensables en este campo. Ambos profesores eméritos de la Universidad de Puerto Rico recibieron la distinción de Humanista del Año en 1993.

Una de las memorias más intactas de quienes tuvieron la oportunidad de compartir con ambas figuras es la vocación pedagógica y el valor de amistad, de respeto, y solidaridad que siempre demostraron a sus estudiantes. Así los recuerda el profesor de Estudios Hispánicos, el doctor Roberto Fernández Valledor, quien se considera uno de esos afortunados.

“Manolo y Fina fueron maestros con mayúsculas pues sus desvelos éramos sus estudiantes y se preocupaban por darnos lo mejor de sí. Han sido amigos entrañables, su hogar, su biblioteca y su tiempo siempre estuvieron a nuestra disposición, siempre con el mismo entusiasmo”, relató.

Fernández Valledor destacó la emoción que sentía cada vez que visitaba la residencia de los esposos. “Entrar a aquella casa era penetrar a un santuario de paz. Llegar a la biblioteca significaba entrar al templo sagrado de la cultura. Siempre me sentía sobrecogido cuando me sentaba en ese lugar a conversar con ellos”, narró el profesor jubilado de Estudios Hispánicos quien asegura experimentar la misma sensación cada vez que atraviesa la Sala en la Biblioteca General que contiene unos seis mil títulos.

“Más trascendente que eso es la historia que existe en cada uno de esos libros porque en ellos subyace gran parte de unas vidas, es un auténtico tesoro bibliográfico”, puntualizó Fernández Valledor.

Por otro lado, la conferencia principal La obra de los doctores Josefina y Manuel Álvarez estuvo a cargo de la doctora Carmen Dolores Hernández, quien ofreció una visión de la importancia de la obra paralela que llevaron a cabo Rivera y Álvarez Nazario en los campos de lengua y literatura. La crítica literaria presentó la aportación de ambos eruditos dentro de un marco histórico en Puerto Rico en el ámbito humanístico y cultural.

A juicio de Hernández, uno de los legados más relevantes de los autores es que dieron contexto a la obra puertorriqueña en el extranjero. “La contribución de ellos ha puesto a Puerto Rico en muchos mapas del mundo que no tienen que ver con un dominio colonial. Entre sus muchos legados, don Manolo y doña Josefina nos han dado el de la libertad”, manifestó la crítica literaria.

Por último, Pérez, en representación de la doctora Rivera quien no pudo asistir a la conmemoración, agradeció “todas las muestras de cariño, respeto y solidaridad demostradas no solo en la mañana de hoy sino a través de los años”. De igual modo, enfatizó que considera un privilegio la labor que ha realizado los pasados 10 años de “proteger los tesoros de la Colección, estimular la lectura y la investigación en nuestros usuarios, recopilar y divulgar la obra de los doctores Álvarez Nazario y estimular el talento joven”.


Presentación del libro

La conmemoración continuó con la presentación del libro Actas del primer congreso de lengua y literatura Manuel Álvarez Nazario, cuyo propósito es reconocer el trabajo del lingüista, exaltar la lengua puertorriqueña y difundir los recientes estudios críticos realizados por la facultad del departamento de Estudios Hispánicos. Los compiladores de esta obra fueron los doctores, Doris Martínez Vizcarrondo, Rafael Colón Olivieri y Katzmín Feliciano Cruz. La presentación estuvo a cargo de los doctores Nadeska Mayens y Manuel Figueroa Meléndez.

“Las Actas son un conjunto de artículos de ponencias que se presentaron en el primer Congreso de Lengua y Literatura que reconoció la labor del doctor Manuel Álvarez Nazario, en el 2002”, expresó Martínez, quien fue una de las organizadoras de la actividad junto a la doctora Lissette Rolón. El libro contiene trabajos de lingüística, literatura y comunicación de académicos nacionales y extranjeros. Además abarca trabajos de carácter científico, crítico y literario escritos en lengua española y portuguesa.

Martínez agregó que sin duda, la importancia de las Actas es “que le deja a la comunidad un legado del esfuerzo de los intelectuales puertorriqueños y otros invitados de América Latina en cuanto a la lengua y literatura, al mismo tiempo que el objetivo principal es compartir las ideas desarrolladas y luego dejar registrado para la historia el trabajo que se realizó”.

Este libro se divide en análisis lingüísticos y literarios, como por ejemplo estudios del lenguaje, que son muestras de investigaciones que examinan las aportaciones de Álvarez Nazario al español de América y Puerto Rico. Por otro lado, los literarios se componen de estudios críticos que analizan textos de la literatura puertorriqueña y latinoamericana.

Finalmente, en la dedicatoria del libro, el doctor Luis A. Ortiz López manifestó que “la obra de Manuel Álvarez representa la búsqueda de las raíces, de nuestras semillas lingüísticas y de los contactos lingüísticos que conforman la idiosincrasia puertorriqueña, como nación latinoamericana. Su contribución como humanista, educador y lingüista lo ubica entre los grandes hombres de Puerto Rico”.


Los doctores Josefina Rivera y Manuel Álvarez Nazario, donaron su biblioteca personal y los objetos que la habitaban para conformar una colección especializada en lingüística y literatura puertorriqueña, española e hispanoamericana.


La doctora Carmen Dolores Hernández tuvo a su cargo la conferencia principal. (Foto por Carlos Díaz / Prensa RUM)


De izquierda a derecha: el doctor Jaime Martell, María del Carmen Pérez, Carmen Dolores Hernández y el doctor Roberto Fernández Valledor.


Con motivo del décimo aniversario, se realizaron dos eventos en los que se exaltaron las aportaciones del dúo en la literatura y la lingüística. (Foto por Carlos Díaz / Prensa RUM)


Tapa del libro de las Actas del primer congreso de lengua y literatura Manuel Álvarez Nazario.


A lo largo de su trayectoria, la Sala se ha convertido en un centro de investigación literaria.


En la Sala que alberga la Colección, los textos, objetos y recuerdos transmiten la calidad humana y la vocación educadora de quienes la forjaron.

Fotos por Alessandra Otero Ramos / Prensa RUM