¡Se me dio venir al Colegio!


¡Se me dio venir al Colegio!
Por Rebecca Carrero Figueroa
rebecca.carrero@upr.edu
PRENSA RUM



viernes, 9 de julio de 2010

¡Saludos profesora Maira Teresa! Le escribe Soniely Lugo, hija del doctor Lugo y Sonia Ruiz, estudiantes suyos. No sabe lo contenta que me puse el saber que mis papás toman una clase de computadora... Más aún, me emociona que siguen yendo a clase y están atendiendo. Yo usualmente los amenazaba con que todos mis hijos le iban a enviar ‘e-mails’ y también ‘e-cards’ y que no iban a saber de ellos si no aprendían a usar computadoras, jajaja... Nada me había funcionado, así que solamente quería decirle que gracias, porque los ha motivado a seguir sin miedo a las computadoras. Espero que pueda seguir ayudando a más personas como mis padres y que siga igual de contenta y cariñosa como ellos me la describen. Con cariño y siempre agradecida de usted, Soniely.

Lo anterior, es uno de varios testimonios del exitoso curso Introducción a las Computadoras e Internet para la Tercera Edad que ofrece el Programa de Cursos Cortos y Proyectos Especiales adscrito a la División de Educación Continua y Estudios Profesionales (DECEP), del Recinto Universitario de Mayagüez. Como tantos otros, los esposos Lugo fueron una de varias parejas que se matricularon en la sección de la profesora Maira T. Rodríguez, motivados por mantenerse a la vanguardia en un mundo que se vuelve cada vez más tecnológico.

Para algunos se trata de un regreso a la Universidad. Otros, se estrenan como universitarios después de laborar durante años y ahora, encontrarse en el retiro o desempleados.

“Trabajamos mucho con desempleados que buscan una alternativa para readiestrarse o adiestrarse en la búsqueda de empleo. Estamos contribuyendo a mantener la población general actualizada con las necesidades y nuevas oportunidades. Atender a quienes no pueden venir a tomar otro bachillerato porque resulta muy difícil por el horario y el proceso de admisiones,” explicó el doctor José I. Vega, director auxiliar a cargo del Programa de Cursos Cortos y Proyectos Especiales de la DECEP.

“Nosotros atendemos la necesidad de mejoramiento profesional. Muchos de nuestros ofrecimientos se pueden convertir en oportunidades para montar empleo o complementar ingresos como los de: técnica de uñas, floristería, confección de bizcochos, etc. Aunque no necesariamente son currículos entrelazados, los estudiantes ven qué curso tomarán. Además, contamos con estudiantes no solo del Oeste, sino también de otras partes de la Isla”, agregó.

Precisamente, entre ellos, se encontraba el matrimonio compuesto por Hipólito Arroyo Acosta y Maricruz González, de Cabo Rojo.

“Nos matriculamos en el curso para ampliar conocimientos que no habíamos podido obtener antes y como ella fue despedida por la Ley 7, acordamos que tenía que prepararse para hacerle frente a la vida y vimos una oportunidad en el curso de computadoras. Como ella estaba trabajando, no lo veíamos necesario. Una vez la despidieron, decidimos que teníamos que seguir hacia adelante. Y yo, para estimularla, también me matriculé”, explicó Arroyo.

Sin embargo, ese no es el único curso que toma Maricruz, ya que también asiste al de Facturación Médica que complementa con los estudios en Enfermería que realiza en otra institución. La pareja planifica continuar con el curso avanzado de computadoras y ella, el de Facturación Médica Avanzada.

De otra parte, la historia del doctor Basiliso Lugo y Sonia Ruiz, es distinta. Estos ex alumnos de la clase del 1973 del RUM, tienen a su vez cuatro hijos, también colegiales. Él, graduado de Enfermería, y Ella, de Ciencias Políticas, ahora regresan a su Alma Máter para adiestrarse en computadoras.

“Volver al Colegio es una experiencia distinta en términos de que ahora tenemos más madurez; sobre todo, estamos más relajados… porque el Colegio da estrés. Ahora uno viene por pasión o por placer”, sostuvo Ruiz.

El doctor Lugo explicó que poco a poco se dieron cuenta de la necesidad que tenían de aprender sobre el manejo de las computadoras. Primero, porque como padres de universitarios, adquieren este tipo de equipos, y en su práctica como anestesiólogo y administrador de su oficina, es algo importante y hasta entonces, desconocido. Además, señalan la ventaja de comunicarse por medio de ellas.

“Nuestra hija nos amenazó al decirnos que no podríamos comunicarnos con nuestros nietos. Ahí fue cuando dije: ¡Estoy atrás! Tengo que aprender. Ahora me siento tranquilo, he mandado emails, el primero a mi hija… ella estuvo mucho tiempo insistiendo en que aprendiéramos. Fue una experiencia gratificante cuando recibimos ese primer email,” comentó.

Al igual que la pareja Arroyo, los Lugo tomarían el curso avanzado y uno acerca de programas de computadoras como Power Point y Skype para comunicarse con sus hijos. Asimismo, expresaron que la mayor ventaja del curso ofrecido por Rodríguez es que estaba compuesto por gente de la misma edad, por lo que no se sintieron cohibidos. “Además, la profesora tiene una habilidad especial”, afirmaron.

Desde hace tres años, la profesora Rodríguez está a cargo del curso, que en esta ocasión contó con 12 estudiantes. Para ella, la experiencia ha resultado muy gratificante y al mismo tiempo la llevó a realizar algunos ajustes en su método de enseñanza.

“Cuando decidí volver a dar la clase pensé que iba a ser igual de fácil que en el pasado. Tan pronto comencé, me di cuenta que me había metido en un pequeño lío… Pero, gracias al doctor David González (que estaba dando una clase similar, pero para personas de comunidades especiales en Mayagüez) identifiqué y corregí mi error. Él me recomendó que imaginara que eran niños pequeños a quienes se les enseña jugando. Así que en la parte de manejo del mouse, que es la primera clase, los puse a jugar solitario y dominós en la computadora. Eso ha sido un éxito”.

Además de la experiencia educativa, Rodríguez relató que cuenta con varias anécdotas acerca del alcance de su curso. Entre ellas, destaca la clase en la que explicó cómo buscar información en Internet y en la que una de sus alumnas “viajó por todo el mundo sin salir de su casa, todo gracias a la computadora”.

Así quedó demostrado cómo mediante los ofrecimientos de Educación Continua la Universidad se acerca a la comunidad. Según indicó el doctor Vega, su enfoque es responder a la necesidad del amplio sector al que sirven y reiteró que están receptivos a recibir propuestas de cursos en los que haya necesidad.

Para saber más sobre los ofrecimientos de DECEP puede llamar al 787-832-4040, extensión 3054, o puede visitar la página electrónica http://www.uprm.edu/educon.

Algunos de los doce estudiantes matriculados en el curso de la profesora Maira T. Rodríguez.
Algunos de los doce estudiantes matriculados en el curso de la profesora Maira T. Rodríguez. (Foto suministrada)