Luego de caminar en la vida y al finalizar el trecho que me tocó
sería dichoso si ante las pruebas del destino,
más allá de todo elogio y poder,
que al morir les dijeran a todos que estoy dormido
para poder recorrer vivo,  la pista que me vio correr…
Manuel Ramírez Freyre

Repicaban las campanas que interpretaban el Himno del Colegio, su insistente y melódico tintinar en la soleada mañana del miércoles, 6 de abril, anunciaba un evento histórico, solemne y especial: La última carrera de Norberto.

Como un colegial de todo corazón pidió que su carrera final fuera en aquella pista en la que practicó cuando fue atleta del entonces Colegio de Agricultura y Artes Mecánicas (CAAM). Y así, se cumplió uno de los últimos deseos del licenciado Norberto Cruz Arias, un polifacético deportista que trajo glorias al ahora Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) y a Puerto Rico, por su excelente desempeño atlético.

Un grupo de sus amigos y familiares se congregó en la antigua pista atlética del Recinto para vitorear esta peculiar carrera. El coche fúnebre que llevaba los restos de este distinguido colegial, quien falleció el viernes, 1^ro de abril, recorrió la pista. Mientras, los presentes aplaudían y exclamaban con voces tristes, pero firmes: "Colegio, Colegio, Colegio".

Justo frente a las gradas, se detuvo la carroza. Algunos atletas de todos los tiempos le hicieron guardia de honor portando la bandera del RUM. Mientras, se honró su memoria al recordar sus gestas como deportista colegial y su calidad humana.

"Él había pedido de favor que se le diera la oportunidad de recorrer nuevamente la pista en la que él corrió; más que una petición, era una obligación de nosotros hacerlo. Es un honor tenerlo aquí... Norberto no está muerto, Norberto hoy está con nosotros... lo vamos a ver corriendo su última carrera, su último tramo, su última carrera hacia la eternidad, su última carrera hacia la inmortalidad del deporte puertorriqueño", dijo el doctor Manuel Ramírez Freyre, decano de Estudiantes.

Minutos después se escenificó la estampa de una carrera, varios atletas del ayer se ubicaron en las posiciones, y allí simbólicamente también estaba Norberto Cruz Arias. Entonces, Ramírez Freyre apuntó hacia el cielo la pistola que anunciaría la salida. "En sus marcas, listos, fuera", exclamó al tiempo que se escuchó la detonación que marcaba el singular momento.

En la meta le esperaban sus amigos y familiares que al unísono cantaron el Himno del Colegio. "Aquí, en esta pista, quedará sembrado por siempre el sudor y el esfuerzo de todos aquellos atletas que, como Norberto, hicieron posible hacer del Colegio lo que es hoy, el Colegio que se respeta en todos los lugares", afirmó el Decano de Estudiantes.

Cruz Arias falleció a la edad de 77 años, en su residencia ubicada en Mayagüez Terrace. Original de San Juan, donde nació el 5 de junio de 1936, se trasladó hacia la Sultana del Oeste en 1954 para cursar estudios de Agronomía en el CAAM.

Gracias a sus habilidades como atleta, pues dominaba múltiples disciplinas, recibió una beca para estudiar en el Colegio, donde despuntó y se desarrolló hasta convertirse en uno de los deportistas más importantes de la historia RUM.

En 1956, recibió la distinción del competidor más valioso de las Justas. Precisamente, durante sus cuatro años como atleta colegial ganó los 100 metros en tres ocasiones. Asimismo, fue el mejor en tres oportunidades en triple salto, obtuvo otras dos medallas de oro en los 110 metros con vallas y se destacó en los relevos y en salto largo. De igual forma, sobresalió a nivel internacional en baloncesto y en las selecciones de Puerto Rico; también participó en béisbol.

"Yo lo recuerdo como el más fogoso competidor que jamás tuvo el Colegio, en las salidas de las carrerras retaba a sus contrarios a que le ganaran, a Manuel Rivera y Rubén Díaz, que eran las estrellas del POLI (Universidad Interamericana de San Germán) y la (Universidad) Católica", recordó el doctor Fred Soltero Harrington, segundo Rector del RUM, durante la particular ceremonia de despedida.

Agregó que "su espíritu colegial fue todo el tiempo el que guió su vida. Personalmente me dijo que él era lo que había llegado a ser por el Colegio y por Rafael Mangual... Norberto Cruz es posiblemente el atleta más versátil que ha pasado por el Colegio. Después que se graduó nunca abandonó el Colegio, siguió activo en la Asociación (Alumni), en la que también fue presidente". De hecho, esta entidad lo reconoció como Colegial Distinguido con la denominación de Eterno Colegial.

Norberto Cruz Arias llegó a la meta de esta especial carrera con la que culmina una fructífera vida. Y fue así que resonó una vez más ese grito de triunfo que tantas veces le emocionó: ¡Eeeeeeehhhhhhhhhh.... COLEGIO!

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El licenciado Norberto Cruz Arias, fue un polifacético deportista que trajo glorias al Colegio y a Puerto Rico, por su excelente desempeño atlético.

Concepto artístico: Juan A. García / Prensa RUM