Proyecto Esperanza da paso a abarcador proyecto
de investigación
Colegiales atienden y estudian comunidades mayagüezanas luego del huracán María
Por Cynthia Maldonado Arroyo
Decanato de Artes y Ciencias
En medio de la devastación y la incertidumbre que provocó el huracán María tras su paso por la Isla, un grupo de colegiales, encabezado por el doctor Edwin J. Asencio Pagán y su familia, catedrático auxiliar y director asociado del Departamento de Ciencias Sociales (CISO) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), atendió la necesidad de varias comunidades, de Mayagüez y pueblos aledaños, afectadas por el poderoso ciclón.
Luego de identificar la necesidad apremiante, como falta de alimento, vivienda y ropa, de estas comunidades y de estudiantes de dicho departamento, se dieron a la tarea de suplirla. “A partir de estas dos necesidades, convoqué a estudiantes de CISO, quienes se mostraron muy receptivos”, expresó el doctor Asencio Pagán.
El 15 de octubre de 2017, el grupo, compuesto además por profesores del mismo departamento, miembros de la Fraternidad Nu Sigma Beta y estudiantes de la clase graduanda 2018 de la Escuela Superior Interamericana de San Germán, salió a la calle para entregar suministros y cientos de comidas calientes, e identificar necesidades más específicas en las comunidades de El Maní, La Boquilla, Jardines del Caribe, Santa Rosa de Lima y La Vía, entre otras de la zona. A partir de este momento, y de la desesperanza que percibieron en los ciudadanos, la iniciativa tomó el nombre de Proyecto Esperanza.
Asimismo, mientras el Recinto y el país se recuperaban, continuaron identificando casos de estudiantes con necesidades apremiantes, algunos de los cuales llegaban hasta el departamento, lugar que se convirtió en centro de acopio, gracias a los donativos de los grupos que se unieron al esfuerzo.
“Ese centro de acopio comenzó a tener mucha fuerza. Los mismos estudiantes, en sus comunidades y hogares, hicieron lo propio. Comenzaron a traer productos enlatados, medicamentos y artículos de primera necesidad”, contó el líder del proyecto. Gracias a esto, también pudieron impactar comunidades en los pueblos de Añasco y Cabo Rojo, donde entregaron suministros en una escuela elemental, celebrar Acción de Gracias y Navidad, con comida caliente y juguetes, en algunas de las comunidades, y entregar camas de posición, colchones y otros muebles a las familias afectadas.
Del humanitarismo a la investigación
El resultado de esta iniciativa humanitaria fue ganar la confianza de las comunidades y sus residentes; confianza que le abrió puertas a otro grupo de estudiantes, también liderado por el doctor Asencio Pagán, que simultáneamente había comenzado una investigación como parte del Programa de Adiestramiento en Investigación Subgraduada (PAIS), adscrito al Departamento de CISO. Algunos de los estudiantes pertenecían al Proyecto Esperanza.
En un inicio, el enfoque de la investigación giraría en torno a la Junta de Supervisión Fiscal. Sin embargo, cuando los estudiantes del proyecto, entre ellos la estudiante de CISO Osciris Vargas Vargas, compartieron su experiencia con el resto del grupo de investigación, decidieron estudiar la resiliencia y la vulnerabilidad biofísica y social de los residentes de las cinco comunidades mayagüezanas que el Proyecto Esperanza había atendido, arriba mencionadas.
De esta manera, surge el proyecto de investigación Actitudes y características de resiliencia que presentan una muestra de residentes de comunidades vulnerables del municipio de Mayagüez ante los efectos del Huracán María, para la cual realizaron 341 encuestas, y que a su vez generó otras dos partes cualitativas. La primera de estas analizó las experiencias de residentes que desalojaron y no desalojaron sus residencias, que se basó en 16 entrevistas, mientras que la segunda estudió los síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT) en ocho residentes de la comunidad de El Maní.
De acuerdo con la estudiante Osciris, las primeras dos fases de la investigación se enfocaron en mirar “cómo ellos se pueden preparar, de acuerdo a lo que ya conocen, a largo y a corto plazo, y entender por qué no se quieren ir”. La tercera fase identificó síntomas de TEPT en sus participantes, como pensamientos involuntarios y abstenerse de ver imágenes, videos y noticias relacionadas al evento.
El grupo determinó que, debido a que muchos residentes desean permanecer viviendo en estas comunidades, comenzarían a desarrollar actividades para educarles en cuanto a la vulnerabilidad biofísica y social a la que están expuestos. A este esfuerzo se unió el Programa Sea Grant de la Universidad de Puerto Rico (UPR), quien otorgó al proyecto una subvención económica de $4,500.
El proyecto se enfocará además en promover la estructura comunitaria, “porque, a nivel individual, sí manejan la situación y son resilientes, pero la resiliencia a nivel colectivo es pobre. No se reúnen, pues los líderes comunitarios ya son mayores y hay muchas personas encamadas”, explicó Osciris. La meta es profundizar en el estudio de estos y otros aspectos “para saber cómo implementar lo que ellos necesitan y tratar de que estas comunidades no estén olvidadas”, sostuvo la estudiante.
Por su parte, el doctor Asencio Pagán hizo hincapié en cómo ambos proyectos ayudaron a que este grupo de estudiantes se desarrollara con gran sentido de humanismo, responsabilidad, ética de trabajo y compromiso genuino “ante el dolor que estaba viviendo la gente”. “Hace tiempo no tenía un grupo como este”, destacó.
El proyecto de investigación, que presentó recientemente sus hallazgos en el RUM y en un congreso en la UPR de Carolina, y que ha sido reseñado por la prensa del país, continúa trabajando y poniendo a disposición sus conocimientos y recursos para el beneficio y el desarrollo de estas comunidades. Para continuar la diseminación de sus hallazgos, el grupo se prepara para presentar en una universidad de los Estados Unidos el próximo semestre.
Además del doctor Asencio Pagán, fueron fundadores del Proyecto Esperanza: Edwin Asencio Camacho, Eniel Asencio Camacho, Wendaliz Camacho Vega, Ian Asencio Camacho, Osciris Vargas Vargas, Clery Morales Torres, Orlandy Cabrera Valentín, Santos Rivera Cardona, Héctor O. Colón Cabán, Ricardo Serrano Rodríguez, José Montalvo González, Juliana Mojica Medina, Valeria Belvis, Natalia Paz Bonilla, Luis Soto y Naileen Rosado Rodríguez.
Los estudiantes investigadores fueron: Osciris Vargas Vargas, Orlandy Cabrera Valentín, Osciris Vargas Vargas, Naysha Alcalá Loaiza, Thairys Flores Ocasio, Luis Soto Collazo, Ivannayeli Hernández Nieves, Valeria Belvis Aquino, Kathianny Cervantes Quiñones, Sarita Rivera Avilés, Clery Morales Torres, Paola Goyco Ortiz, Claudia Cruz Tirado, Angélica Díaz y Laiana Lugo Santori.
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