¿Qué son los estudios de las mujeres y el género?
Los estudios de las mujeres y el género son una disciplina académica reciente que postula que las mujeres, a lo largo de la historia, han generado saberes y siguen aportando visiones beneficiosas para la sociedad que los currículos académicos invisibilizan y excluyen como reflejo de la inequidad que ellas experimentan hasta el día de hoy con respecto a los varones. Este nuevo campo de estudios subsana esa exclusión y examina los saberes y aportaciones que las mujeres producen, validando sus experiencias, intereses y visiones de mundo como base epistemológica para la construcción de conocimiento. De esa forma se supera el androcentrismo, o sea, se desplaza de su posición central la concepción del varón como paradigma o modelo de lo humano. Por su parte, el término “género” se ha usado dentro de esta disciplina para referirse a la diferenciación de tareas, características y representaciones asignadas socialmente y recreadas por las personas de acuerdo con su sexo atribuido. El concepto permite hablar de un sistema sexo/género que produce la inferiorización y subsiguiente subordinación de lo “femenino”, causante a su vez de la exclusión y la opresión de las mujeres. Otro concepto utilizado para analizar el orden social, económico, político y cultural de subordinación de las mujeres es el de patriarcado. De acuerdo con esta noción, las sociedades patriarcales surgieron en el neolítico y constituyen una toma de poder histórica mediante la cual los hombres se fueron apropiando de los cuerpos y del trabajo de las mujeres, despojándolas de sus poderes reales y simbólicos. Los estudios del género analizan la transversalidad de esos procesos y prácticas, o sea su manifestación en diferentes contextos históricos y culturales y su intersección con otras opresiones, como las de clase y raza. A la vez, buscan rescatar las estrategias de resistencia y lucha de las mujeres, hasta nuestros días, para la superación de esa forma de colonización de los cuerpos y de su producción económica y cultural.
El feminismo sirve de base a los estudios de las mujeres y el género. Surge en el siglo XVIII como un análisis de la situación de opresión de las mujeres en la sociedad y como un reclamo de los entonces nacientes derechos de ciudadanía. Con el tiempo, se fue convirtiendo en un poderoso movimiento social y en una de las más fructíferas teorías críticas de la cultura. Como resultado de su alcance global, a partir de la última parte del siglo XX comienzan a surgir programas de estudiosmde las mujeres en universidades de diversas partes del mundo. Estos currículos consisten de un conjunto de teorías, conceptos y metodologías para estudiar a las mujeres, validar sus saberes y analizar su opresión desde una perspectiva ética y política. Pueden aplicarse en las diferentes disciplinas académicas, científicas y humanísticas, y producir análisis fascinantes dentro de las artes, el cine, la lingüística, la bioética, el folclor, los medios, la cultura pop, la tecnología y hasta la cibernética. Hoy abarcan también estudios feministas de las masculinidades, así como de la transgresión de los paradigmas de género y sexualidad.
