Estudiantes del RUM obtienen campeonato en dos prestigiosas competencias energéticas a nivel internacional y en Estados Unidos
Prensa RUM
lunes, 10 de mayo de 2021
El talento, la disciplina, el dominio en el tema y la determinación de los estudiantes del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR) los llevó a conquistar el primer lugar en su representación pionera en dos prestigiosas competencias en el área de energía a nivel internacional y en Estados Unidos: la 2021 Humanitarian Technology Project Design Competition, de la Power and Energy Society (PES) del Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE) y su Comité de Actividades Humanitarias, en la que el equipo colegial se colocó en primer lugar de Latinoamérica y Mundial; y la 2021 US Department of Energy Solar District Cup Denver, cuyos embajadores de sangre verde obtuvieron, igualmente, el primer lugar.
En la primera, Humanitarian Technology Project Design Competition, el RUM arrasó entre 65 equipos de distintos países del mundo, con su Proyecto Luz Verde UPRM, con un sistema de paneles fotovoltaicos para brindar energía solar y empoderar a las comunidades.
Mientras, en la US Department of Energy Solar District Cup Denver, el Colegio brilló ante 72 prestigiosas universidades estadounidenses con un proyecto de diseño de sistema fotovoltaico con almacenamiento de energía solar para la ciudad de Denver, Colorado.
Bajo la consejería del doctor Eduardo I. Ortiz Rivera, catedrático del Departamento de Ingeniería Eléctrica y de Computadoras (INEL/ICOM) y mentor del grupo de investigación Minds2CREATE, los alumnos alcanzaron la importante gesta en medio de un contexto de pandemia y con la celebración de ambos eventos de manera virtual, cuyas etapas finales coincidieron el último fin de semana de abril.
“Me siento privilegiado por el logro de los estudiantes que no solo contaron con nuestro apoyo como profesores, sino con el de sus familias. La bandera de Puerto Rico no la podemos poner más alto, hemos hecho lo que se debe hacer. Siento el orgullo de decir que ha sido un equipo colaborativo, de alumnos subgraduados, graduados y de otros profesores mentores. En mi caso, que llevo sobre 15 años trabajando en el Recinto Universitario de Mayagüez, uno siente el orgullo de ser colegial, de haber estudiando aquí, y de hoy día estar preparando a los futuros líderes en el área de sistemas de energía. Estos jóvenes son los próximos responsables de diseñar sistemas de energía renovables, fotovoltaicos, alrededor del mundo”, reiteró el doctor Ortiz Rivera.
Con un entusiasmo contagioso, los líderes de ambos equipos, junto a algunos integrantes y a su consejero, relataron a Prensa RUM, los pormenores de esta inigualable experiencia. Javier A. Moscoso Cabrera, en tercer año de Ingeniería Eléctrica, se desempeñó como líder de la Humanitarian Technology Project Design Competition y habló de ese reto junto a Tirso A. Peña Ruiz, en quinto año también de Ingeniería Eléctrica, cuya aportación como integrante del grupo fue crucial. Mientras, Cristian R. Meléndez González, en segundo año de maestría en Ingeniería en Computadoras, fue el gerente de proyecto del US Department of Energy Solar District Cup, desafío del que ofreció detalles con Ángel Gabriel Ortiz Rodríguez, en cuarto año en Ingeniería de Software, quien también formó parte esencial del colectivo.
Humanitarian Technology Project Design Competition
La edición de este año de la Humanitarian Technology Project Design Competition, de la Power and Energy Society (PES) del IEEE y su Comité de Actividades Humanitarias, contó con 65 equipos internacionales, entre estos, India, Brasil, Bangladesh, Sri Lanka, Marruecos y España, en representación de sus respectivos capítulos estudiantiles alrededor del mundo, con el reto de crear una propuesta vinculada al área de la energía eléctrica con un objetivo humanitario y de servicio a su comunidad.
Los colegiales prevalecieron con su Proyecto Luz Verde UPRM, que consta del diseño de un gazebo solar para el Patio Central del RUM que genera su propia energía utilizando paneles solares. Tiene sus raíces en la fragilidad del sistema eléctrico puertorriqueño, luego del paso del huracán María, lo que demostró la relevancia de brindar energía solar a las comunidades y empoderarlas en momentos de vulnerabilidad. Precisamente, es una iniciativa que llevan desarrollando desde octubre de 2019 en el capítulo colegial de la Power and Energy Society del IEEE, en el que crearon un equipo de investigación para aprender sobre el tema, y este semestre integraron la consejería docente. Además, han creado alianzas con otras universidades como parte de sus estrategias y, entre ellas, han contado con la pericia de Leonardo Guadalupe Correa y Adriana Torres Martínez, estudiantes de arquitectura del Recinto de Río Piedras de la UPR y de la Universidad Politécnica, respectivamente, quienes contribuyeron a mejorar el diseño estructural del proyecto.
“Ha sido muy enriquecedor para todos por el conocimiento adquirido y por las experiencias a las que nos hemos expuesto. Me parece bien importante destacar la perspectiva educativa. Nuestra propuesta es básicamente sobre paneles fotovoltaicos que, en el 2021, se podría decir que no es innovadora, pero nos hicieron una pregunta clave sobre qué lo diferencia de otros. La respuesta es que no solo queremos diseñar y aportar un sistema que te pueda cargar el teléfono celular, las tabletas o computadoras, sino que nuestro objetivo es enseñar cómo lo hace porque es una solución que puede salvar vidas. Literalmente, empoderamos a las personas sobre sus propias vidas y supervivencia. Nuestro deber como estudiantes no es solo seguir aprendiendo, sino compartir ese conocimiento con la comunidad. Esto ha sido una victoria de todo el equipo, les estoy muy agradecido”, aseveró Javier, gerente de proyectos del capítulo de la Power Energy Society en el RUM.
Coincidió Tirso, quien se impresionó con la calidad de lo que presentaron sus contendientes internacionales, pero eso no amilanó sus deseos de luchar y defender lo que habían desarrollado, pues sabían de su potencial.
“La competencia estaba bien fuerte, porque casi todos los diseños eran súper bien elaborados y detallados, pero pensamos en que teníamos que dar la batalla y nos unimos en ese propósito. Distribuimos las tareas efectivamente, trabajamos incansablemente y logramos el primer lugar. De verdad que ni me lo podía creer, pero lo celebramos y estamos bien emocionados. Cabe recalcar que este proyecto no termina aquí; tenemos varios planes, entre ellos desarrollar la primera estructura aquí dentro del Recinto y luego impactar a otras comunidades para así llegar a tener una sociedad más sostenible y crear conciencia de cambiar a energía renovable y ayudar al ambiente. Esa es la parte más importante de este proyecto: su impacto humanitario”, agregó Tirso, responsable de la edición de los videos de las presentaciones, entre otras tareas.
Según explicaron, el grupo se inscribió en el evento apenas el pasado febrero y comenzó a trabajar a toda máquina para tener lista su participación que se extendió desde el 17 al 25 de abril, día de la ronda final. En una de las preliminares, le tocó el turno a los países latinoamericanos, y el conjunto boricua ganó en esa fase imponiéndose a contendientes fuertes como Brasil. Luego, de los 65 equipos que iniciaron, se escogieron los mejores 10 y el RUM también se colocó en el primer lugar a nivel mundial, presea dorada que compartió con un equipo de la región de Asia y el Pacífico, creador de un proyecto de purificación de agua con energía solar.
Los líderes de esta iniciativa resaltaron la intensa jornada laboral, las horas de desvelo, y sobre todo la colaboración y solidaridad de todos los componentes del grupo, quienes enfrentaron el reto adicional de una diferencia de hora con los anfitriones del evento que estaban ubicados en India. Su primer lugar mundial recompensa todo el esfuerzo, aseguraron.
Aparte de Javier y Tirso, el equipo estuvo compuesto por los estudiantes Alexis Burgos Rivera, Marcos Carballo Martínez, Melody Cosme Morales, Christopher Flores Fermín, Jorge Santiago Fernández y Feli Solá Viera, así como con la mentoría del doctor Ortiz Rivera. Igualmente, contó con la colaboración de los profesores Marcel Castro Sitiriche, Lionel Orama Exclusa y Fabio Andrade Rengifo.
2021 US Department of Energy Solar District Cup Denver
Por otro lado, la 2021 US Department of Energy Solar District Cup Denver, constó de realizar un proyecto de diseño de sistema fotovoltaico con almacenamiento de energía solar para la ciudad de Denver, Colorado. Esta fue evaluada por miembros de la industria solar, académicos, investigadores y personal del Departamento de Energía de Estados Unidos, principal auspiciador del evento. Con una duración de un año académico, la primera etapa comenzó en septiembre de 2020, fase a la que entraron 72 universidades a participar; y la segunda contó con 28 contendientes que lograron pasar a la próxima etapa.
“Se añadieron unos retos adicionales dependiendo del distrito, entre los tres que habían, que eran Denver, Colorado; Lincoln, Nebraska; y Orlando, Florida. Nuestro reto era añadir un sistema de baterías a uno de los edificios y asegurar el 30 por ciento de la carga de este y, a la misma vez, generar energía para otras estructuras del campus o distrito que se compone de tres universidades diferentes y el área de la ciudad de Denver donde había un centro de convenciones inmenso y un centro de arte”, detalló Cristian, quien también realizó su bachillerato en Ingeniería de Software en el RUM en 2019 y cuyo trabajo de tesis es, precisamente, en el área de energía y optimización de sistemas eléctricos para crear comunidades resilientes.
El sistema propuesto por los colegiales, que beneficiaría a una población de alrededor de 40 mil personas, incluyó más de 12 mil placas y contó con un análisis de cómo impactaría la red eléctrica de Denver, así como un estudio financiero para determinar si era costoefectivo y viable para la ciudad y los usuarios. Igualmente, se preparó un plan de mercadeo con recomendaciones para crear conciencia sobre lo que es la energía renovable y movilizar la opinión pública a favor de este tipo de iniciativa.
“Nos enfocamos mucho en el área de lo que es mercadeo, no solamente en el diseño, la ingeniería y los aspectos técnicos, sino que también en el área comunitaria, cómo mejorar y enseñarles a las otras personas que esto funciona y ayuda al ambiente. Pienso que eso fue lo más que nos ayudó a ganar la competencia. Gracias también a todos los estudiantes del grupo que se empeñaron mucho en su parte y todos esos aspectos nos ayudaron a que la presentación final les encantara a los jueces. De hecho, considero que nuestro rol fue muy importante para generar un cambio y para ayudar a las futuras generaciones que asuman este reto”, dijo Cristian, único integrante que tuvo la oportunidad de viajar y hacer un recorrido por Denver para luego compartir la información con su equipo.
Por su parte, Ángel, responsable de analizar el impacto de añadir las placas solares al sistema eléctrico existente en esa ciudad, catalogó la vivencia como una de crecimiento.
“Fue una experiencia bastante buena y me gustó mucho porque el profesor fue adentrándonos en la idea de que este tipo de conocimiento se puede aplicar a lo que son los sistemas eléctricos de Puerto Rico. Todavía yo no estaba tan desarrollado en este tema y me falta mucho por aprender, pero incorporé lo que he aprendido de software a este tipo de análisis y de estudio, y definitivamente tuve la oportunidad de enriquecerme en todo el proceso”, agregó Ángel.
Ambos alumnos resaltaron el incansable trabajo en equipo y la aportación valiosa de cada integrante en representación de casi todas las ingenierías: Eléctrica, Mecánica, Civil e Industrial con quienes contaron. Las amanecidas, las extensas horas de faena e intensas prácticas para perfeccionarse rindieron fruto, especialmente al ver que se impusieron a competitivas universidades como Georgia Tech, Ohio State University, Universty of Illinois at Urbana-Champaign.
“Todo valió la pena porque quedamos campeones y pienso que es un logro para nosotros como estudiantes y para la Universidad en general”, añadió Cristian.
Asimismo, todos los entrevistados coincidieron en los múltiples beneficios de realizar proyectos como estos, que comprenden investigación y responsabilidades fuera de la carga académica del salón de clases, pero que tienen una gran compensación a nivel educativo, personal y en su formación profesional.
Junto a Cristian y Ángel, el equipo lo integraron también: Alanis Colón, Melody Cosme, Jorianys Del Valle, Ángel Figueroa, Juan Fontánez, Guillermo López, María López, Jaziel Torres, Benjamín Santiago, y Michael Vázquez, con la mentoría del doctor Ortiz Rivera y la colaboración de los profesores Leyda V. León, Irving Balaguer y Nelson Acosta.
“Definitivamente, el Colegio debe sentirse orgulloso del talento que tenemos. Ambos equipos llegaron a máximos niveles y se retaron de una manera que no habíamos pensado antes en el Recinto, por lo menos en nuestra área de energía. Demostramos que es posible, y, sobre todo, estamos claros que esto nos puede impactar positivamente y que podemos aplicar estas tecnologías en Puerto Rico. Lo que estamos haciendo es importante, no solamente para ganar competencias, sino para salvar vidas y tener un mejor sistema eléctrico. Queremos diseñar sistemas renovables, estamos preparando a estos profesionales y el Colegio es esa punta de lanza para lograr todos esos cambios”, puntualizó el doctor Ortiz Rivera.