Por Ídem Osorio De Jesús (idem.osorio@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 11 de octubre de 2019

Su infalible vocación, acompañada por una sólida trayectoria de estudio, docencia, investigación y quehacer en su disciplina, motivaron a que se exaltara, con una de las distinciones más prestigiosas, a la doctora Ramonita Vega Lugo, catedrática del Programa de Historia del Departamento de Ciencias Sociales del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), electa como Académica de Número de la Academia Puertorriqueña de la Historia.

El memorable logro se validó con la ceremonia de incorporación formal, que se celebró recientemente en el Museo Pilar Defilló y Espacio Cultural Pablo Casals de la Sultana del Oeste, donde la homenajeada recibió la investidura, que consta de una singular medalla de plata, y ofreció un discurso de aceptación ante un concurrido público compuesto por familiares, colegas, amigos, y miembros de la entidad.

Dedicada a servir a la comunidad local e internacional, a través del ofrecimiento de conferencias, la contribución de textos y publicaciones, así como asesorar a los estudiosos del tema, esta Academia reúne, desde 1934, a los historiadores de mayor prestigio del país.

Según se detalló, la incorporación de un nuevo miembro conlleva la otorgación de un número, que se recibe por la vacante que deja otro académico ante su fallecimiento. La doctora Vega Lugo acogió la Medalla #3 correspondiente a la que perteneció al doctor Fernando Bayrón Toro, catedrático colegial jubilado del Departamento de Ciencias Sociales, cuyo deceso ocurrió el pasado mes de julio.

“El significado que tiene como símbolo de la investidura es su valor incalculable. Le añade mayor emoción saber que correspondió a tres insignes figuras: el respetado líder magisterial, profesor José González Ginorio; el insigne historiador de la medicina, doctor Salvador Arana Soto; y al doctor Fernando Bayrón Toro. Como si no fuera suficiente para colmarme de orgullo, la pasión por la investigación histórica que nos conectó y la amistad compartida con él, se añade otro esplendor. Ahora también nos une el número de su medalla”, reiteró la profesora, cuyas instancias y vocaciones se entrelazaron con las del también educador, abogado y escritor.

La educadora explicó que más allá de coincidir en esta distinción, su pasión mayagüezana es, sin duda, otro de esos denominadores comunes entre ambos.

“De hecho, quise reconocer los méritos del doctor Bayrón Toro, con quien establecí un estrecho vínculo profesional, al punto de que era quien originalmente estaba confirmado para responder mi discurso de incorporación”, agregó, al tiempo que relató que tuvo el privilegio de prologar una de sus últimas publicaciones en 2015: Expediente de la fundación de Mayagüez (1760).

Precisamente, la conferencia que dictó la catedrática llevó por título Mayagüez nos une: historias en contrapunto como un homenaje a la ciudad que le ha brindado el tema principal de su línea de investigación histórica. De hecho, esta ceremonia, generalmente, tiene lugar en la sede de la Academia en el Edificio Ballajá de San Juan, no obstante, la homenajeada convocó a los académicos a trasladarse al oeste para que pudiera asistir la comunidad que la vio nacer y que permanece tan cercana a sus raíces.

Según establece el protocolo, el doctor José Rigau Pérez, director de la Academia, tuvo a su cargo presentar a la doctora Vega previo a su disertación. Luego, le correspondió contestar su discurso al doctor Héctor R. Feliciano Ramos, también Académico de Número. Con esta incorporación, se convierte a su vez en Académica correspondiente de la Real Academia de la Historia de España.

“Exhorto al investigador de lo histórico a examinar la historiografía mayagüezana como un conjunto armónico, no exento de contrariedades. Agradezco a quienes que me preceden y a los que son mis contemporáneos en la investigación continua. Todos y todas tienen eco en mis escritos y les reconozco como los pilares que me han elevado y, a su vez, sostenido”, pronunció la doctora Vega Lugo en la parte final de su ponencia.

Igualmente, instó a sus colegas a contribuir al relevo hacia la próxima generación, para que puedan asumir los retos de auscultar sobre viejos y nuevos problemas.

“En cada esfuerzo de investigación reconocemos pistas o indicios y confirmamos lo consabido: no hay historias completas. Aún cuando los acordes de nuestras historias puedan estar en contrapunto, el enfoque se logra armonizar. Es cuando se entiende que, a pesar de las múltiples disonancias y consonancias, en temas o en debates inconclusos a través del tiempo, nuestro lugar común: Mayagüez como proyecto para la investigación, por siempre nos une”, puntualizó.

Para el recinto mayagüezano de la Universidad de Puerto Rico (UPR), el logro alcanzado por la catedrática representa un gran prestigio institucional, que colocará su amplia experiencia y conocimiento al servicio del país y a nivel internacional.

Así lo constataron algunos de sus colegas y principales funcionarios colegiales como el doctor Edwin Asencio Pagán, director interino del Departamento de Ciencias Sociales (CISO), quien reconoció su aportación a la docencia y a la investigación desde su disciplina.

“Esta merecida distinción, engalana nuestro Programa de Historia e institución. Este es un premio de suma relevancia que no recibe cualquier persona. En esta ocasión, recae en una mujer que ha trabajado arduamente, que nos ha representado dignamente y que merece todo el reconocimiento”, aseveró el Director.

Asimismo, sus compañeros docentes de CISO y los del Programa de Historia, extendieron ese saludo a través de una placa y un certificado que le entregaron durante la ceremonia.

“Su esmero y esfuerzo al quehacer histórico dan esplendor a nuestro Departamento y hace la diferencia en nuestros estudiantes, en el Recinto y en nuestro Puerto Rico. Hoy le reconocemos por enseñarnos que la hechura de su sabiduría se hace voz cuando amamos lo que forjamos y nos afamamos con pasión”, rezó la dedicatoria de la placa.

Mientras, la profesora María I. Barbot Sosa, decana asociada de Asuntos Académicos de Artes y Ciencias; y el doctor Carlos I. Hernández Hernández, hicieron lo propio, en representación de los catedráticos de Historia, con un certificado en el que le agradecieron por “mostrarnos que la senda al éxito, se hace verbo, como acentuó el bardo español Antonio Machado: ‘caminante, no hay camino, se hace camino al andar’. Enhorabuena, maestra”.

Iguales palabras tuvieron el Decano interino de Artes y Ciencias, doctor Fernando Gilbes Santaella; y el Rector del RUM, doctor Agustín Rullán Toro, quienes felicitaron a la nueva Académica de Número por su distinción.

“Nuestra Facultad de Artes y Ciencias se siente muy orgullosa por esta distinción que representa un reconocimiento a su excelente trabajo como académica e investigadora. Enhorabuena”, expresó el Decano en una carta circular.

Coincidió el Rector, al destacar la labor de esta docente, que labora en el Recinto desde el 2011 y cuyo acervo investigativo está documentado en una extensa serie de publicaciones, lo que realiza de manera cónsona con todo esfuerzo humanístico encaminado a la conservación del patrimonio y a la valoración del arte en sus múltiples manifestaciones.

“Es un privilegio contar en nuestro claustro con un recurso tan excepcional, que ha contribuido tanto a la historiografía nacional y cuyas aportaciones ahora se validan y reconocen con esta selección por la Academia Puertorriqueña de la Historia. Nuestro Recinto se enorgullece y honra por su merecida exaltación”, manifestó el doctor Rullán Toro.

La doctora Ramonita Vega Lugo posee un doctorado en Filosofía y Letras, con concentración en Historia de Puerto Rico y el Caribe, otorgado en 2001 por la UPR, Recinto de Río Piedras. Su tesis doctoral Urbanismo y Sociedad: Mayagüez de Villa a Ciudad, 1836-1877, se publicó como libro en el 2009.

Tiene una extensa carrera profesional que incluye experiencia en el Colegio de Arquitectos y en el Archivo General de Puerto Rico. Comenzó su labor docente en el Recinto de Río Piedras de la UPR en 2001; y desde el 2011, en el RUM, donde ha dictado entre sus cursos: Historia de Puerto Rico; Metodología y técnicas de investigación; Investigación histórica para redacción de tesina; Historia de las Antillas, y Bibliografía e Investigación en las Ciencias Sociales. En julio del 2018, recibió ascenso al rango máximo docente de catedrática. Es la coordinadora del Programa de Historia desde el 2015.

Su vida académica y profesional se entrelaza entre esa faena educativa, la investigación continua y la divulgación de sus hallazgos. En cada semestre, participa en actividades en torno a sus líneas de investigación, particularmente las que están relacionadas con las ciencias sociales en general, la historia urbana, la sanidad pública y la beneficencia durante el siglo XIX.

Vega Lugo es miembro de importantes entidades profesionales y ha recibido un sinnúmero de premios y distinciones a lo largo de su carrera. Su próximo libro, sobre la epidemia del cólera en Puerto Rico, durante el siglo XIX, se encuentra en proceso de edición final.