Profesora del RUM presenta publicación sobre mujer transgénero
Por Javier Valentín Feliciano (javier.valentin@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 9 de abril de 2021
La novela Piedra de Luna es una obra literaria que rompe esquemas en muchos sentidos. Posee el personaje de una mujer transgénero que lucha contra el prejuicio, al igual que del acoso por su identidad de género; documentada con datos históricos que ocurrieron en Puerto Rico y a nivel mundial, que han servido de estandarte para la comunidad LGBTQI, y ya se puede decir que se integró al amplio canon de la Literatura puertorriqueña.
La doctora Ángela M. Valentín, catedrática auxiliar del Departamento de Estudios Hispánicos del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico, presentó esta publicación en un evento que se llevó a cabo por las redes virtuales, ante la pandemia, y que contó con el auspicio del Instituto de Cultura Puertorriqueña.
“Tuve la oportunidad de ser la lectora en el comité de tesis de maestría en Creación Literaria de la Universidad del Sagrado Corazón, de Richard Rivera Cardona. En aquel momento, tanto el doctor Ángel Emilio Soto, conocido literariamente como Emilio del Carril y esta servidora, coincidimos en que teníamos entre las manos un gran proyecto literario. Richard se preparó exhaustivamente para trabajar en la redacción de su obra a través de un trabajo de investigación sólido. Producto de su proceso investigativo, el autor nos presenta una estremecedora novela en la que se adentra en una de las realidades más inéditas de nuestra literatura puertorriqueña, la situación de la comunidad trans, y nos invita a escuchar la historia de Piedra de Luna, a mirarnos en su espejo. Rivera Cardona entrelaza con maestría la ficción y las pinceladas históricas, la clave perfecta para documentar de manera alternativa muchas de las realidades invisibilizadas en nuestro país”, expresó.
Agregó que, Rivera Cardona trabajó con maestría el encuentro de dos personajes que, a medida que se desarrolla la historia, se fusionan. Asimismo, esta novela nos cuenta a una protagonista que desde su niñez estaba atrapada en el cuerpo con el cual no se identifica.
“El arte se convierte en el espacio alternativo para tocar unos temas que necesitan plantearse. La obra literaria nos cuenta del rechazo de su entorno, de la precariedad física y económica a la que es arrastrada como resultado del prejuicio, que no le permite acceder a mejores condiciones de vida, a una vida justa. Le cuenta esta historia, su historia, la historia anónima de tantos, a un interlocutor privilegiado en muchos sentidos. La historia de Piedra de Luna y de sus compañeras terminará por tocar lo más profundo del protagonista, también de cada uno de sus lectores”, sostuvo.
La profesora universitaria reveló durante su alocución que en Puerto Rico no existen estadísticas concretas sobre la situación real y las necesidades de esta población, solo se cuentan con cifras que provienen de Estados Unidos. Además, señaló que desde 2010 al 2011 hubo 18 asesinatos de mujeres trans sin ninguna investigación y tan reciente como el asesinato de Alexa que tuvo lugar en Toa Baja, así como tantos otros.
Para su autor, Rivera Cardona, esta es su segunda publicación, pues ya tenía bajo su autoría Salto al vacío, que incluyó trece cuentos y que se dio a conocer en 2018.
“Haber presentado la novela con el apoyo del Instituto de Cultura Puertorriqueña fue un gran logro en el sentido de acercar el texto a la gente. Tuve el honor de contar con la participación de los doctores Emilio del Carril y Ángela Valentín, quienes aportaron sus miradas críticas sobre sobre la obra, desde aspectos teóricos hasta históricos y sociales. La novela, por encima de una trama de tema novedoso, se perfila también como un documento histórico. Me siento muy orgulloso de esta publicación que está nutrida de una rigurosa investigación con el objetivo de aportar a nuestra literatura un trabajo que ayude a formarnos como personas críticas y como seres humanos”, indicó.
Agregó que esta novela empezó a escribirla en el 2017, aparte a que combina sus funciones como profesor universitario y motivador para que otros escritores publiquen sus trabajos.
“La obra presenta una mirada actualizada de lo transgénero en el contexto puertorriqueño. Los matices de este tema son casi inéditos en nuestra literatura o han quedado rezagados. Es importante que desde la literatura se aborde esta temática tan actual y tan polémica en nuestra isla. La literatura informa y educa al mismo tiempo que sensibiliza ante los asuntos que nos conmocionan. La obra está escrita con mucha responsabilidad y cuidado editorial. Ojalá se sume a esas grandes creaciones de nuestro acervo literario”, afirmó.
Es importante mencionar que la novela escrita por el profesor Rivera Cardona no es la primera que aborda el tema de la mujer transgénero en la Literatura puertorriqueña, a esta se añaden Sirena Selena vestida de pena escrita por la destacada autora Mayra Santos Febres, así como Conversaciones con Aurelia, cuyo autor es Daniel Torres.
Si desea ver la presentación, acceda a este enlace.
Un aparte con el escritor Richard Rivera Cardona
Rivera Cardona es natural de Aibonito, Puerto Rico, y cuenta con un bachillerato en Periodismo de la Universidad del Sagrado Corazón y una maestría en Creación Literaria de ese mismo centro de enseñanza. Tiene a su haber varios premios literarios, entre ellos ganó el Undécimo Campeonato Mundial de Cuento Corto Oral (2016) y el premio a la Excelencia Periodística que otorga el Overseas Press Club de Puerto Rico en 2014. Sus escritos formaron parte de las antologías De sombras y claridad (2018), Di lo que quieres decir (2018 y 2019), Resistir (2019), Cuentos para el aislamiento (2020) y Letras desde el encierro (2021).
¿Cómo fue que surgió esta novela Piedra de Luna con la suerte de que se convirtiera en un éxito por parte de la crítica y sus lectores?
Piedra de Luna fue mi trabajo de tesis de la maestría en Creación Literaria de la Universidad del Sagrado Corazón, la cual defendí en diciembre de 2017. Durante estos años trabajé para agregarle algunos aspectos relevantes que no había considerado durante el proceso de tesis por motivos de tiempo y finalmente la publiqué en diciembre de 2020. La idea surgió ante el desconocimiento general que existe sobre el tema de la transexualidad. Fue un reto que quise ponerme para entretener y educar.
Además del tema de lo transgénero, también abordas el tema del travestismo, incluso mencionas en el libro a Valeria Méndez, muy reconocida en el ambiente de los espectáculos en discotecas y que colaboró con las múltiples entrevistas que hiciste a muchas de ellas. ¿Cómo fue esa colaboración con Valeria y otras amistades travestis?
Como escritor quise ir al lugar de la acción a recoger, de primera mano, la información que luego llevaría a la ficción. Valeria Méndez es pieza clave del éxito de la novela porque fue la persona que me dio acceso al mundo del transformismo, quien me explicó con mucha paciencia todos los pormenores y quien me puso en contacto con varias personas que me contaron sus experiencias de vida. Ella es uno de los personajes de la novela, a quien llevo a la ficción para esparcir su magia en la literatura. Asimismo, es una forma de documentar burbujas de nuestra historia que han sido invisibilizadas.
Quise trabajar el tema del travestismo o transformismo desde la mirada artística. Se tiene el prejuicio o la idea básica de que todos los transformistas son personas transgénero, sin embargo, el transformismo es una manifestación artística de actores que se preparan para ofrecer un espectáculo. Me interesaba indagar en sus identidades y conocer cómo estas se configuran en estos contextos tan complejos. El libro es un boleto de entrada para empatizar con estas realidades que nos resultan lejanas y difíciles de entender.
¿Cuéntanos sobre el proceso de investigación que tuviste que realizar para crear la novela, ya que realizas múltiples referencias históricas que ocurrieron dentro y fuera de Puerto Rico?
Cuando ideé la novela quise que esta sirviera para documentar las realidades de la población trans en Puerto Rico. Para ello era trascendental el contexto histórico y social. Identifiqué distintos eventos históricos alusivos a la temática de la novela y lugares que los personajes pudieran visitar. Luego, hilvané la historia para que estos elementos pudiesen incorporarse de una manera natural y afectaran la narración. Era una especie de base para que la construcción ficticia tuviera mayor sentido para los lectores. Para ello tuve que leer mucho, contrastar información, validar datos y seleccionar, cual si fuera una investigación periodística.
¿Cuáles han sido las críticas que has recibido?
La respuesta de los lectores ha sido maravillosa porque se han dado la oportunidad de leer la novela pese a los prejuicios o a los pudores que podamos tener. La lectura les ha permitido conectar con el personaje, hacerse amigos de Piedra de Luna y al final querer abrazarla. Esa era mi idea desde el inicio: acercar estas realidades a la gente. Muchas personas han expresado que la historia les ha chocado por la crudeza, algunas se han reído mucho gracias al sentido del humor de la protagonista y otras han dicho que la novela les ha permitido educarse con relación al tema.
En cuanto al apoyo, ha sido extraordinario. El libro se ha agotado en varias ocasiones y la curiosidad de los lectores ha estado encendida desde el primer momento. Para ello ha sido clave el arte de la cubierta, del diseñador gráfico Julio García, y el potencial que tienen las redes sociales para conectarnos.
¿Cuáles son tus autores de cabecera, alguno tuviste en mente cuando escribiste Piedra de Luna?
Mi autor favorito es el chileno José Ignacio Valenzuela, quien está en boca de todos por ser el creador de ¿Quién mató a Sara?, la serie más exitosa del momento en Netflix. Me enamoré de su forma de escribir desde hace años cuando descubrí su versatilidad como autor, pues ha trabajado desde teatro y libros para niños hasta telenovelas y novelas para adultos.
Cuando comencé a escribir Piedra de Luna se hizo obligatorio revisitar obras icónicas puertorriqueñas que han abordado el tema de la diversidad sexual, particularmente las realidades de personas transgénero, entre ellas Sirena Selena vestida de pena (2000), de Mayra Santos Febres, y Conversaciones con Aurelia (2007) de Daniel Torres. Ambas novelas resultaron apuestas muy osadas por la temática que presentaban. Sin embargo, estos temas han sido objeto de estudio constante durante los últimos años y me pareció pertinente crear una obra que nos permitiera, desde el entretenimiento, abordar la evidencia científica reciente. También quise presentar los retos actuales de las personas transgénero en Puerto Rico. A pesar de la rigurosidad del proceso, este relato criollo no le hace justicia a la realidad, pues las personas transgénero son el grupo minoritario más marginado en el mundo. La realidad supera todo lo atroz que he podido traer a la ficción.
Esta es tu segunda publicación literaria, ¿cómo te sirvió o te ayudó tu primer libro de cuentos Salto al vacío en este proceso creativo?
Salto al vacío surgió de manera espontánea, sin la idea de que fuera una colección de cuentos para publicar. Fui redactando los relatos de forma independiente. Luego, les vi potencial para convertirse en un libro y les hice algunas modificaciones para que tuvieran un hilo conector. Esa experiencia me ayudó a entender la importancia de la estructuración de un proyecto literario desde sus inicios. Piedra de Luna sí fue trabajada de manera consciente en cada una de sus etapas, lo que facilitó la redondez de la propuesta.
¿Deseas adelantarnos cuáles serán tus próximos trabajos literarios?
Tengo en mente trabajar una novela juvenil y un poemario.