Por Mariam Ludim Rosa Vélez (mariam.ludim@upr.edu)
Prensa RUM
jueves, 21 de marzo de 2019

El Módulo Simulador Dr. Daniel Wendichansky Bard, perpetuará para siempre la memoria del catedrático de Ingeniería Civil y Agrimensura (INCI) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), quien falleció recientemente.

Hoy sus colegas, discípulos y familiares se reunieron en el Anfiteatro del mencionado Departamento para recordar al educador natal de Argentina que trabajó por tres décadas en el Colegio.

Su compatriota, el doctor Luis E. Suárez, también de INCI, reseñó la trayectoria del catedrático a quien cariñosamente apodaban Wendy.

“Estuvo muy involucrado en nuestro programa graduado, ya sea dirigiendo estudiantes o en los comité graduados, además de ofrecer los cursos antes citados. Entre sus estudiantes de maestría se encuentran Jorge Ayala, Edgardo Vélez, Juan Carlos Virella, Ildefonso Burgos, María Cortés, Carmen Centeno, Samuel Cuadrado, Yomar Otero, Esteban Pabón, Ricardo Pérez, Igdalia Santiago, Paul Kohan y Natalie Theut. Edgardo Vélez posteriormente completó su doctorado bajo la dirección de Wendy con una disertación titulada Experimental cyclic behavior of reinforced concrete wall houses loaded in their weak direction. Edgardo ahora es un exitoso profesional con el Cuerpo de Ingenieros en Jacksonville, Florida. Su última estudiante graduada fue Seaska Pérez, que presentó su tesis de maestría el 4 de diciembre de 2018. En esta ocasión ya estaba afectado de salud y no pudo asistir personalmente a la defensa de tesis, por lo que usó Skype para poder participar”, relató Suárez.

“Debo destacar que María Cortés, luego de completar su maestría, fue a continuar estudios doctorales en la misma universidad que Wendy y es ahora profesora en el Departamento de Ciencias de Ingeniería y Materiales. La mesa vibradora grande que está en el Laboratorio de Estructuras es fruto de la tesis de maestría de la doctora Cortés. De hecho, debe mencionarse que el doctor Wendichansky fue director del Laboratorio de Estructuras durante muchos años y durante su incumbencia se desarrollaron allí varios proyectos con fondos externos; muchos de ellos resultaron en tesis y disertaciones”, agregó.

En su alocución, resaltó que el catedrático tenía un gran sentido del humor y mencionó varios ejemplos que arrancaron risas de los presentes.

“Nuestras comunicaciones de trabajo por e-mail siempre terminaban con algo así: ‘Bueno, Lucho, deja de rascarte el ombligo y ponte a trabajar: pareces empleado público‘. Otro ejemplo de su humor único: cuando le escribí para saludarlo, luego de su operación del cerebro, me contestó un largo mensaje del cual quiero citar estas oraciones: ‘Dentro de todo, esto tiene sus ventajas porque ahora tengo excusas para no asistir a las reuniones de departamento y de facultad’. Definitivamente, ni la adversidad extrema le hacía perder su humor (ni sus sarcasmos)”, expresó Suárez.

Concluyó con el siguiente mensaje: “aunque no podemos luchar contra los designios de la vida, el paso de Wendy por este mundo no será como huellas en la arena que borra el mar sino, usando una metáfora de ingeniería civil, como huellas en un hormigón fresco que al secarse perdurarán por años y años en los muchos estudiantes y colegas que su vida ha impactado”.

También lo recordó la doctora Cortés, quien fue estudiante de Maestría del doctor Wendichansky.

“Además de ser un excelente profesor tenía una mente orientada a la investigación analítica y experimental. Decía siempre: ‘solo los duros son los que pueden hacer investigación experimental’. Siempre me retaba para que diera más de mí y eso me sembró la confianza de seguir hacia adelante. Eso me ayudó a ser de esa misma manera con mis estudiantes. Ese es el legado que deja en mí”, afirmó.

Al homenaje asistieron su viuda Nora Brodsky, y sus hijos Carolina y Luis Mauricio.

“El lograba acortar esa diferencia que existe entre el profesor y estudiantes, era muy jocoso, muy imparcial en los exámenes, y trataba de impartir justicia. Es un ejemplo que podemos seguir. Mi papá era profesor todo el tiempo, aquí en la Universidad, en la empresa privada y en casa. Estudié aquí en el Colegio y si tenía algún curso de Matemáticas, Física o Estadísticas, él se sentaba conmigo y mi hermana, y tenía la paciencia de ayudarnos. Te hacía sentir como que podías hacerlo”, relató su hijo Luis Mauricio, egresado de Ciencias Políticas del RUM.

También estuvieron presentes el doctor Pedro Vásquez, decano asociado de Asunto Académicos, en representación de la rectora interina del RUM, Wilma L. Santiago Gabrielini; y el doctor Omell Pagán, decano asociado de Ingeniería.

El pasado mes de noviembre de 2018 se llevó a cabo una actividad para dedicarle la instalación que alberga un simulador de terremotos.

La actividad se hizo en reconocimiento de la gesta y el impacto que tuvo Wendichansky Bard en sus estudiantes y en la institución.

En aquella ocasión, Santiago Gabrielini compartió la dedicatoria del Módulo en la que destacaba la labor de catedrático, natural de Argentina.

“En 1996, regresa a Puerto Rico y comienza a dirigir el Laboratorio de Estructuras, de Ingeniería Civil. Bajo la dirección del doctor Wendichansky y con la misión de que esa instalación fuera una competitiva se instaló un puente grúa motorizado, que permitió mover especímenes pesados de un lugar a otro del laboratorio con un esfuerzo mínimo. También, se conectó lo que se conoce como el piso fuerte con el área general del laboratorio, se adquirieron nuevos sistemas de recolección de data y se compraron nuevos controladores para el sistema hidráulico existente, así como varios instrumentos de medición, todo con la ayuda de algunos de sus colegas como Ricardo López, José Martínez Cruzado e Ismael Pagán Trinidad, actual director de Ingeniería Civil”, indicaba, durante la mencionada ceremonia la Rectora, al resaltar las huellas que dejó el educador.

Precisamente, durante las honras fúnebres, que se efectuaron el pasado lunes, 11 de marzo, Santiago Gabrielini dio el pésame a los familiares y amigos que se congregaron en la Funeraria Mayagüez Memorial para darle el último adiós.

“La Universidad pierde a un valioso educador e investigador, quien hizo del Colegio de Mayagüez, su hogar y de nuestra isla, su segunda patria, desde que llegó a Puerto Rico, procedente de su natal Argentina, para unirse a la comunidad colegial como estudiante del programa de maestría en Ingeniería Civil. Tras finalizar su doctorado en Estados Unidos, regresó al Recinto para iniciar una brillante carrera, tanto docente como investigativa, que le valió numerosas distinciones, como la de Profesor Destacado, entre otras”, manifestó la Rectora.

“El doctor Wendichansky se distinguió por ser un luchador incansable”, indicó, por su parte, el profesor Ismael Pagán Trinidad, director de INCI.

De hecho, una delegación colegial rindió homenaje póstumo con una guardia de honor en la Funeraria al también investigador que deja su huella.