Por Ídem Osorio De Jesús (idem.osorio@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 3 de mayo de 2019

Con la misión de conocer distintos acercamientos sobre lo que representa ser hombre dentro de un contexto de pluralidad, así como abrir un espacio de diálogo y concienciación sobre el particular, un grupo de estudiantes del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), organizó el panel Hacia una nueva mirada a las masculinidades, en el que se discutió la relevancia de modificar los esquemas aprendidos e incorporar la perspectiva de género en respuesta al modelo hegemónico.

La tarea recayó en los integrantes del curso Psicología de la diversidad humana del Departamento de Psicología (PSIC), que aborda cada semestre temas específicos de contraste en la sociedad y en el individuo, y se concentra en estudiar y analizar su complejidad en todas las facetas y cómo incide en la disciplina.

De acuerdo con el doctor Eduardo Lugo, catedrático de PSIC y profesor de la clase, este panel forma parte de un ciclo de actividades que realizan, desde hace aproximadamente cinco años, con la misión de profundizar en asuntos de impacto y relevancia como el coloniaje, el trabajo con la comunidad sorda y la estigmatización de la pobreza, entre muchos otros.

“Yo quería enmarcar la discusión dentro de lo que históricamente estamos viviendo. Hay una resistencia a lo que es la promoción de la diversidad en muchos espacios; estamos viendo cambios en políticas públicas. Por ejemplo, en Estados Unidos se están comenzando a ofrecer cursos en los que se mezclan estos tópicos con la empatía y la importancia del conocimiento científico ante el entendimiento de la multiplicidad, en este caso, de las masculinidades. Mi aspiración es a que cuando escuchen de esto no solamente lo pongan en un contexto de conocimiento, sino que piensen acerca de cómo se está manejando a nivel político y social en diferentes partes del mundo, incluyendo nuestro país”, reiteró Lugo, al inicio del foro.

Al saludo del docente, se unieron los de los doctores Douglas Santos y Luis E. Nieves Rosa, directores de los departamentos de Psicología y Ciencias Sociales, respectivamente, quienes dieron la bienvenida a los colegiales reunidos en el anfiteatro del Edificio Luis De Celis.

Como conferenciantes invitados, participaron: el doctor Irvyn Nieves Rolón, catedrático en el Departamento de Trabajo Social de la Universidad Ana G. Méndez, Recinto de Carolina; y el profesor Heriberto Ramírez Ayala, artista, activista y educador, quienes ofrecieron sus perspectivas del tema desde sus experiencias investigativas, docentes, comunitarias y personales.

“Es un asunto de importantes repercusiones para la sociedad y es pertinente para todos. Quise darle por nombre a mi presentación Repensar la hombría, por varias razones: no hay tal cosa como una sola manera de ser hombre, hay distintas expresiones y elementos que tienen que ver con esas formas en que nos hacemos hombres como identidad, socialización, y cómo nos relacionamos con otros varones y con mujeres”, subrayó el doctor Nieves Rolón, para abrir su intervención.

El también profesor en la Escuela Graduada de Trabajo Social de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Recinto de Río Piedras, puso en perspectiva una serie de definiciones importantes para entender este tema, que investiga desde hace dos décadas y cuya raíz, aclaró, se origina en los estudios feministas.

Igualmente, abundó sobre conceptos como el patriarcado o sistema de dominación que privilegia la masculinidad hegemónica; la lucha por la equidad de género; la construcción social que se hace sobre el sexo; y algunos ejemplos de cómo el lenguaje normaliza esa supremacía.

Según explicó el catedrático, la masculinidad hegemónica perpetúa el estereotipo normalizado del hombre como ser superior, justifica su dominación, e indica que este debe mostrarse fuerte, inhibirse de demostrar sensibilidades, usar la violencia para probar su hombría y ser proveedor económico, entre otras prerrogativas. Ese modelo, legitima a un niño como hombre, en la medida en que logre demostrar esas capacidades y funciones.

Algunas de las estadísticas más recientes disponibles en Puerto Rico reflejan que el sector masculino acapara un 72 por ciento de las personas sin hogar; un 97, de las encarceladas; un 95 de las víctimas de muertes violentas; y ocupan tres cuartas partes de la población infantil y de adolescentes con diagnósticos de condiciones de salud mental.

“Todo esto sin contar que su expectativa de vida es menor a la de las mujeres. Socialmente, algo está pasando en la forma en que se están haciendo hombres”, reiteró, al tiempo que compartió algunos hallazgos de sus investigaciones con adolescentes y la manera en que definen su hombría.

De acuerdo con esos datos, las experiencias de socialización que más han impactado su desarrollo tienen que ver con la existencia o ausencia en el hogar de una gestión de educar y adquirir los valores en su formación; la figura paterna; la exposición y capacidad crítica que tengan los varones hacia la información transmitida por los padres y la actividad sexual.

Como parte de sus recomendaciones o acciones prometedoras, Nieves Rolón instó a considerar el cuadro completo a la hora de hacer el análisis, reflexionar sobre las experiencias personales desde la perspectiva de género y reconceptualizar los paradigmas sobre género.

La segunda parte del panel comenzó con una intervención artística del Súper Macho, un superhéroe creado e interpretado por Ramírez Ayala, quien utilizó su performance para crear conciencia sobre los roles masculinos de fuerza y poder asociados con estos personajes.

Tras su caracterización, el activista social tomó la palabra para mostrar a través de ejemplos visuales, fotos y videos lo que son las masculinidades contestatarias o representaciones de las identidades que retan, cuestionan y rechazan ese modelo hegemónico constantemente.

Según esbozó, algunas maneras de promoverlo es con la demostración pública de emociones como afectividad, compasión, ternura y tolerancia; con el rechazo a la violencia; la propulsión al desarrollo de formas alternas de relación entre los géneros y en su género, y la lucha por los derechos humanos.

Ramírez Ayala, con formación en Teatro y quien posee una maestría en Gestión y Administración Cultural de la UPR-RP, completó un posgrado relacionado con la intervención con hombres, género y masculinidades en España. Es el creador y fundador del grupo Tipos, un taller para la reflexión masculina que integra el arte y el mindfulness, y cuenta con experiencia como educador transdisciplinario.

Todos sus vivencias en el campo profesional y personal, relató, le han brindado la plataforma necesaria para concienciar, una misión en la que ha utilizado los medios de comunicación y las redes sociales, ideales para crear contenidos que eduquen y produzcan un balance. Además, destacó la necesidad de llevar esa lucha con empatía y solidaridad.

“El trabajo de nosotros como varones, necesita un grupo de apoyo, una mentoría cruzada, un seguimiento. En mi caso, el arte ha sido una herramienta para sensibilizar, expresar y experimentar otros mundos posibles. Hacerlo en equipo, te hace sentir acompañado, en tribu, para poder revincularnos y crear otras formas de ser y estar en este planeta”, puntualizó.