Por Alex O. Tubéns Plaza (alex.tubens@upr.edu)

Taller de Estudiantes/PRENSA RUM

viernes, 29 de mayo de 2020

Los egresados colegiales Esmeralda Niño Pérez, Yaileen Méndez Vázquez y Dick Arias González, junto a su consejero académico, el doctor Mauricio Cabrera Ríos, del Departamento de Ingeniería Industrial (ININ) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), recibieron la prestigiosa medalla Tocher, que otorga la revista especializada Journal of Simulation a los autores del mejor artículo en un periodo de dos años.

Los galardonados alcanzaron esta distinción, luego de que la publicación internacional seleccionara el escrito titulado A Simulation-Optimization Strategy to Deal with Tens of Decision Variables and Multiple Performance Measures in Manufacturing, sobre la optimización basada en la simulación, como el más sobresaliente durante el ciclo entre 2018 y 2019.

Este premio lo otorga la asociación británica The Operational Research Society, y para este se considera la contribución a la filosofía, teoría o práctica en el campo de la simulación. La medalla con la que se reconoce a los ganadores fue nombrada en honor a KD Tocher, autor del libro The Art of Simulation, una referencia importante en el mundo de la simulación, y cuyo desarrollo, el General Simulation Program, es considerado como una de las piezas fundamentales para el avance del software de esta disciplina.

Así lo dio a conocer el doctor Cabrera Ríos, catedrático de ININ, quien dirige The Applied Optimization Group, un grupo de investigación que se enfoca en la caracterización estadística, el modelado matemático y la optimización de sistemas de manufactura y sistemas biológicos.

“La publicación científica es una parte esencial de hacer investigación, así que obtener un reconocimiento de alcance mundial de una prestigiosa organización es un gran aliciente para seguir adelante en estos quehaceres. En su momento, todos los coautores del artículo fueron estudiantes llevando a cabo investigación y apoyándose en ello para obtener un grado de estudios, ya fuera de bachillerato o de maestría, en nuestra Universidad. Esto es importante enfatizarlo: se resaltó un trabajo hecho por colegiales en el Colegio”, indicó el también profesor en el programa graduado de Bioingeniería.

“Publicar es su propio placer, logro y orgullo; ser distinguidos por ello, es la frutilla del postre. En el caso de Esmeralda y de Yaileen, era ya muy impresionante graduarse de una maestría con artículos publicados, así que, el que uno de sus trabajos haya sido galardonados de esta manera, es un gran logro a nivel personal y profesional para ambas. Especialmente extraordinario, es el caso de Dick, quien estaba en bachillerato cuando contribuyó para que publicásemos este trabajo”, añadió.

De hecho, Dick recalcó su asombro al enterarse de que su equipo había sido seleccionado como recipiente de la presea y expresó su sentir respecto a su significado.

“Fue una sorpresa para mí y para todos, ya que habían pasado varios años desde que trabajamos en esa investigación. En particular, representa una validación de nuestro trabajo y del compromiso con la investigación del doctor Cabrera Ríos. El profesor hizo una excelente labor al reconocer nuestras fortalezas y permitir que cada uno de nosotros las utilizáramos al máximo, lo que resultó en este reconocimiento mundial. A nivel personal, es el más prestigioso que he obtenido y me siento muy contento y agradecido por este logro”, señaló.

Tanto el joven como su mentor asistieron a la ceremonia de premiación, conocida como el 2019 Blackett Lecture, que se celebró en el histórico edificio que alberga The Royal Society en Londres, Inglaterra, a finales de 2019. Ambos representaron a las otras dos investigadoras, a quienes no se les hizo posible estar presente. No obstante, todos los integrantes del grupo recibieron su medalla y el certificado que consta el honor conferido.

Según confirmó el doctor Cabrera Ríos, las dos coautoras del artículo culminaron su maestría en Ingeniería Industrial en el recinto mayagüezano de la Universidad de Puerto Rico (UPR). Actualmente, Esmeralda es profesora en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, en México. Por su parte, Yaileen continuó hacia el doctorado en Oregon State University y pronto se iniciará como catedrática auxiliar en Milwaukee School of Engineering. Finalmente, Dick, el tercer coautor, labora como técnico de ingeniería para la compañía Eaton, ubicada en Las Piedras, y está cursando la maestría en Ingeniería Mecánica en el RUM.

El artículo, que les mereció el galardón, propone una estrategia de optimización para tomar decisiones sobre decenas de variables, considerando criterios múltiples de manera simultánea, apoyada en la simulación en un contexto de sistemas de manufactura.

“La simulación es una manera de representar sistemas que no se pueden modelar convenientemente de forma matemática. Para dar un ejemplo sencillo, consideremos un supermercado en donde queremos tomar decisiones sobre muchas variables: el tamaño de los pasillos, la cantidad de cada producto que debe de estar en vitrina o en almacén, el número de cajeros, los horarios, y la asignación de empleados a las estaciones de servicios, entre tantas posibilidades. Dado que considerar tantas variables es bastante complejo, una manera de representar el sistema para este fin, es a través de una simulación por computadora”, detalló el profesor.

Abundó que un propósito de ese proceso decisional en el ejemplo del supermercado podría ser satisfacer la demanda, al tiempo que no se detuviera el dinero en el inventario. Igualmente, en ese escenario se podría aspirar a garantizar pérdidas mínimas por productos perecederos y que, por su parte, los clientes estuvieran cómodos mientras realizan sus compras. Lo que resulta de ese análisis es un problema con decenas de variables de decisión y con muchos objetivos para maximizar o minimizar, que frecuentemente están en conflicto.

“Nuestro artículo propone una estrategia efectiva para resolver este problema. En nuestro caso, los sistemas de interés eran los de manufactura. Ya antes había habido estrategias que tomaban muchas variables en consideración, pero no trabajaban con múltiples criterios, o estrategias para múltiples criterios, pero con un número pequeño de variables. Nuestro esquema, bajo ciertas condiciones, permite llegar a las mejores decisiones demostrablemente posibles, lo cual es siempre deseable”, subrayó Cabrera Ríos.

Para el educador, es sumamente relevante exponer a sus alumnos a este tipo de experiencias investigativas, ya que aportan a su desarrollo desde diversas perspectivas.

“En mi grupo de investigación, hay casi 40 estudiantes de todos los niveles: bachillerato, maestría y doctorado; y de diversos departamentos. Es mucho trabajo y esfuerzo por parte de todos, los cuales se ven recompensados en las contribuciones que se hacen al conocimiento humano colectivo y se ven reflejados en el crecimiento personal, académico y profesional de todos los involucrados”, puntualizó.