Sentido adiós a Tarzán XI, una mascota colegial especial
Por Mariam Ludim Rosa (mariam.ludim@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 16 de octubre de 2020
Tenía el mejor trabajo del mundo. Su descripción de puesto era arrancar suspiros, sacar sonrisas, jugar, recibir y dar cariño, ser una estrella, y por qué no, morder uno que otro portadiplomas. Tarzán XI, cumplió su misión perruna: ¡regalar alegrías!
Cuando el pasado miércoles, 14 de octubre de 2020, Prensa RUM anunció su deceso en las redes oficiales del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), la familia colegial se desbordó con mensajes de condolencias y expresiones de tristeza por el fallecimiento de la icónica mascota del Colegio, un bulldog que ya tenía 12 años.
De hecho, según las métricas de Facebook, al cierre de esta edición, el mensaje de la muerte de Tarzán, alcanzó a unas 90 mil personas (People Reached); tuvo una participación activa de 28,210 (Engagements), así como 154 comentarios expresando tristeza; unos 1,300 compartidos (Shares), así como 2,200 marcados de emoticonos, su mayoría caritas tristes.
Por su parte, en Twitter, la respuesta a la noticia fue vista por 98 mil personas (Impressions); participación activa 24,490 (Engagements), vieron las fotos 16,708 (Media Engagements), recibió 1,600 corazones, 459 compartidos (Retweets); 177 compartidos con comentario (Quote Tweets).
¡Así de querido era Tarzán! Aun desde la virtualidad, emblemática de estos tiempos, recibió un gran homenaje póstumo, a través de las redes sociales y los medios de comunicación que replicaron la noticia en sus portales.
En entrevista con Prensa RUM, Carlos Díaz-Piferrer Sierra, fotógrafo del Recinto y el custodio de las mascotas colegiales desde 1984, agradeció muy emocionado los mensajes de cariño y solidaridad plasmados en estos foros.
“He recibido unas expresiones de amor incalculables. Yo nunca pensé que tantas personas amaban al perro y eso me llena el alma. Hasta el Rector me llamó para darme las condolencias. Tanto mis hijos, como yo, estamos sumamente tristes por la muerte de Tarzán, pero es parte de la existencia, tenemos que nacer, producir y algún día reunirnos con nuestro Creador”, indicó el colegial de colegiales, quien recibe la ayuda de sus hijas Margarita y Milagros Díaz-Piferrer Arzola en el cuidado de las mascotas institucionales.
De hecho, desde la década del ochenta, la Asociación y Fundación Alumni CAAM, que actualmente preside Yamileth Valentín Centeno, patrocina los cuidados de estos especiales canes.
“Jamás te olvidaremos por tus especiales momentos de alegría en las graduaciones, en las Justas y en muchas actividades por 12 años de tu vida. Agradecida de la familia Díaz por sus cuidados y cariño. Ya le daremos la bienvenida al próximo Tarzán que continuará con tu legado y representará al antes, ahora y siempre… Colegio”, expresó Valentín Centeno, en la cuenta de Facebook de la entidad.
Del mismo modo, expresaron sus condolencias el doctor Jorge Haddock, presidente de la Universidad de Puerto Rico, y el doctor Agustín Rullán Toro, rector del RUM.
“Siendo amante de los animales y también, junto a mi esposa, los humanos de varias mascotas, nos embarga la pena de la pérdida de Tarzán, mascota y símbolo del antes, ahora y siempre Colegio. Agradezco de todo corazón las muestras de cariño para quien cumplió con distinción la función de unirnos y alegrar nuestras actividades y eventos universitarios. Reconozco la labor de la Fundación y Asociación Alumni Colegial, entidad que se asegura que tengamos siempre una mascota viviente. Mis sinceras condolencias a Carlos Díaz, fotógrafo de nuestra Oficina de Prensa y vicepresidente de Alumni, a su familia, custodios, cuidadores y humanos de nuestras queridas mascotas colegiales. Nos embarcamos ahora en el proyecto de conseguir el próximo representante viviente de nuestra mascota, colaborando con la Fundación, a través de su presidenta Yamileth Valentín”, afirmó el Rector.
“Como presidente y colegial, lamento el fallecimiento de Tarzán XI, nuestra querida mascota del Recinto Universitario de Mayagüez. En sus 12 años de vida, acompañó lealmente a nuestros estudiantes y empleados en distintos momentos importantes y llenándolos de alegría. La presencia de Tarzán XI en la Universidad es parte de nuestra identidad y tradiciones, pero igual de importante, busca fomentar el cuidado animal, la empatía, y la solidaridad entre nuestra comunidad universitaria, como parte de nuestra responsabilidad educativa y social. Siempre será recordado con cariño”, indicó, por su parte, el doctor Haddock.
La más longeva de las mascotas colegiales
Cuando Díaz Piferrer recuerda el nacimiento de Tarzán XI, a quien apodaban cariñosamente Tito, su voz se quiebra, y es que desde ese momento lo tomó en sus manos.
“Nació por cesárea y el doctor Marrero me lo dio y me dijo que le diera el masaje cardíaco, por eso yo lo amaba tanto, porque lo vi nacer”, expresó conmovido sobre el can, quien era hijo del Tarzán X, quien a su vez era el hijo del Tarzán IX.
“Los perros bulldogs son delicados, es una maravilla que este haya durado 12 años”, agregó.
Por todos estos años, participó en innumerables eventos incluyendo: bienvenida a los prepas, aniversarios del RUM, las Justas de la Liga Atlética Interuniversitaria y la graduación, entre otros. Su más reciente participación fue el pasado 2 de octubre de 2020, con motivo de la celebración de la Semana 4-H del Servicio de Extensión Agrícola, adscrito al Colegio de Ciencias Agrícolas. Previo a esto, el 22 de julio de 2020 visitó el Colegio de Administración de Empresas, como parte de la grabación de la bienvenida virtual a los prepas. Además, el 8 de junio de 2020, asistió a la bienvenida del campamento virtual de Ingeniería Mecánica.
“Es el trabajo de más de 30 años, día a día cuidando y formando el concepto, llevándoselo a los muchachos para que disfruten de la mascota. Ese es el problema que tienen otras instituciones, que tienen una mascota que no se puede acariciar. La nuestra ha ido evolucionando hasta convertirse en un compañero, ya que lo traigo constantemente a la institución y los jóvenes se acercan y me dicen: ‘me puedo retratar con ella’. Y yo les digo: ‘claro, tú eres el dueño’. Es la única mascota que tiene miles de dueños”, enfatizó.
El más famoso de los perros colegiales
Al menos 20 portadiplomas de la graduación de junio 2019, tienen el sello distintivo de Tarzán. Muchos graduandos se acercaban a la mascota para tener la anhelada foto con el perro. Fue en esos momentos que el can atrapaba con sus dientes el emblemático artículo, y para nada quería soltarlo. Era evidente que para él se trataba de un juego. El momento jocoso se hizo viral y la noticia llegó hasta The Dodo, portal especializado en noticias curiosas de animales.
“Después que pasa la graduación, me quedo con el perro y mis hijos, y los jóvenes vienen a retratarse con él. Ya Tarzán estaba un poco corto de vista, y como él tenía una bola verde, pensamos que creía que era su bola de juego y no había forma de que lo soltara. Algunos me decían: ‘déjalo que lo muerda porque así me llevo la firma del perro”. Así que tanto Tarzán, como los muchachos se lo disfrutaron”, recordó.
Gracias al poder multiplicador de las redes sociales, la mascota colegial recorrió el mundo.
“La revolución con las comunicaciones también ha revolucionado la mascota del Colegio que donde quiera que esté, la persona puede ver información del perro”, sostuvo.
La sucesión
El hermano de Tarzán XI, Bandido, como lo apodan en su casa, ya tiene 10 años. Es también hijo de Tarzán X, y tiene una condición congénita en sus ojos que no le permite ejercer funciones como mascota colegial, aunque llegó a participar en varios eventos.
“Es un gordito precioso, muy bueno y cariñoso, que tomará el puesto de su hermano en lo que hacemos las gestiones para conseguir unas mascotas juveniles”, indicó.
La idea de Díaz-Piferrer es que se puedan adquirir dos mascotas, un macho, que sería Tarzán XII y una hembra, que sería Jane IX.
“Cuando pase esta situación de la pandemia y lleguen nuevamente los estudiantes al campus, que podamos ya tener las nuevas mascotas”, dijo.
De hecho, ya varias entidades y criadores de bulldogs se han comunicado para colaborar en esta encomienda. Entre estas, la Asociación Dominicana de Exalumnos del Recinto Universitario de Mayagüez (ADECAAM).
“La mascota del Colegio encierra unos valores y un espíritu, que es lo que hace diferente a otras instituciones en Puerto Rico y el mundo. Los colegiales se viven a su mascota”, concluyó.
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