Vibrante y solidaria Marcha Violeta por la equidad
Prensa RUM
viernes, 11 de marzo de 2022
Tras una pausa involuntaria de dos años ante la pandemia, la Marcha Violeta se apoderó nuevamente de las calles del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) para levantar su voz y su solidaridad por los derechos de igualdad y equidad de género, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
El Comité de Prevención de Violencia de Género de la institución, en conjunto con la Alianza Interuniversitaria e Interagencial del Oeste por la Equidad de Género, se unieron a la convocatoria del Proyecto Siempre Vivas, entidad organizadora del evento que desde 1997 brinda servicios gratuitos de apoyo y consejería desde el recinto mayagüezano de la Universidad de Puerto Rico (UPR) a las víctimas de la violencia de género de toda la región oeste.
“Retomamos esta marcha con la energía, con el poder que viene de nosotras, de todas las mujeres y los hombres que apoyan nuestras iniciativas y la comunidad LGBTQ+, quienes también están aquí. Estamos muy felices porque nos acompañan estudiantes, facultativos, empleados, los compañeros de los sindicatos, es decir, todos como el primer día que lanzamos esta actividad. Reafirmamos nuestro compromiso con la erradicación de la violencia y por la justicia, la equidad y la paz”, aseveró la profesora Luisa Seijo Maldonado, directora de Siempre Vivas.
La también catedrática del Departamento de Ciencias Sociales agradeció la participación de las instituciones educativas que se han sumado a esta gesta como: los recintos de Mayagüez de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico, de la Universidad Carlos Albizu y de NUC University; el Recinto de San Germán de la Universidad Interamericana; los recintos de Aguadilla y Cabo Rojo de la Universidad Ana G. Méndez; la Universidad Adventista de las Antillas; y la Casa Protegida Julia de Burgos, entre otras entidades.
“El oeste se merece un espacio de paz, de justicia y dignidad para todos, todas y todes, por lo tanto tenemos que trabajar a favor de esas poblaciones que están oprimidas, excluidas del contexto social nuestro. Sabemos que ha habido un alza de situaciones, siguen las mujeres solicitando nuestros servicios, y les pedimos que, por favor, nos llamen, que nos busquen. A veces no damos abasto para contestar inmediatamente las llamadas, pero sepan que cuentan con nosotros. Seguimos con los grupos de apoyo, trabajo social clínico y servicios de psicología y consejería. Así que nuestro compromiso continúa como el primer día”, subrayó, al tiempo que destacó la coalición con la Universidad Carlos Albizu, la Universidad Ana G. Méndez, la UPR Recinto de Río Piedras, y la Pontificia Universidad Católica, que proveen los recursos humanos cualificados para el esfuerzo.
La Marcha Violeta, que cumplió con los protocolos vigentes de uso de mascarilla y evidencia de vacunación de sus participantes, partió desde el Edificio Josefina Torres Torres, del Departamento de Enfermería, y recorrió el campus en ruta hacia la Plaza Colón. Sus organizadoras se mostraron esperanzadas en dar continuidad a un acto que consideran muy importante en la lucha por espacios de paz, sobre todo en el contexto universitario.
“Esta marcha es convocada por el Proyecto Siempre Vivas, que lleva más de 20 años elaborando y proveyendo servicios a todos los sobrevivientes de violencia de género. Estamos establecidos aquí en el Recinto en la residencia 5B, como un espacio seguro y accesible. Por esa razón, es tan importante que recibamos fondos, para poder costear a los profesionales de salud mental, de trabajo social y al voluntariado. Deseamos continuar con nuestra labor, pero necesitamos el apoyo del profesorado, estudiantado y, sobre todo, de la administración. Este año venimos con todo el entusiasmo, la energía y el deseo de efectuar algún cambio en nuestro país”, expresó Amanda Sofía Soto González, coordinadora de Siempre Vivas.
Precisamente, al abordar el tema del aumento vertiginoso de casos de violencia de género a raíz del confinamiento por el Covid-19 y de las pasadas emergencias en Puerto Rico, la joven líder enfatizó en la urgencia de dedicar esfuerzos y subvenciones económicas que permitan la continuidad de los servicios de apoyo.
“Lo vimos al principio de la pandemia con el encerramiento, cuando fue básicamente imposible alejar a las personas de sus agresores. Sabemos que los casos se dispararon y, precisamente, es por eso que los grupos feministas y las colectivas solicitaron conversaciones con quienes estaban en el mandato, para establecer medidas que permitan que las mujeres afectadas por la violencia reciban estas ayudas. Necesitamos una solidaridad contundente de todas las partes y en especial aquí del Recinto, que lo atiendan, que lo asuman con seriedad y que se otorguen todos los fondos necesarios. Vivimos en una sociedad patriarcal y capitalista donde lamentablemente lo que mueve es el dinero y por lo tanto esos recursos son apremiantes para atender a todos y todas las sobrevivientes de violencia de género en este país”, agregó Amanda, quien completó un bachillerato en Biología y Microbiología Industrial del RUM el pasado diciembre.
La comprometida colegial de 23 años aseguró que su interés en el Proyecto Siempre Vivas surgió a través de arduas experiencias que le permitieron descubrir su pasión por el servicio y por la justicia.
“Yo tengo una compañera que dice que una se vuelve feminista por su propia historia y así fue mi caso. Pienso que todas las personas, independientemente de su campo de estudio o si ni tan siquiera cuentan con una preparación, somos afectadas por violencia, en especial y desproporcionadamente las mujeres y las personas femmes. Así que, precisamente, atravesar diferentes tipos de violencia en mi vida, me motivó a estar presente aquí y proveer apoyo, sobre todo reconociendo los incidentes de violencia que existen incluso hacia los estudiantes del Recinto. Necesitamos este respaldo”, subrayó.
Por su parte, el decano de Estudiantes, doctor Jonathan Muñoz Barreto, quien se unió a la caminata en representación del Rector, reiteró que el Recinto ha sido pionero y cuenta con distintos tipos de entidades dedicadas a ofrecer servicios de apoyo y fomentar la equidad de género.
“Esta marcha representa muchas cosas: la lucha de las mujeres, no solamente para alcanzar la igualdad, sino para poder llevar también una vida en paz y sobre todo libre de violencia. Ese es el mensaje principal que queremos llevar hoy: que todas las personas, no importa su género, vivan libres de violencia y en específico los grupos minoritarios y las mujeres. Hace más de 100 años que se conmemora el Día Internacional de la Mujer y se ha alcanzado mucho, pero aún tenemos causas que hay que luchar y llevar el mensaje fuertemente para concientizar”, precisó el Decano.
Una de esas entidades incansables en llevar el mensaje y apoyar a la comunidad en el RUM es Siempre Vivas, que el próximo mes de septiembre de 2022 cumplirá su vigésimo quinto aniversario de gestión solidaria y empática ininterrumpida.
“Somos el único Recinto de la Universidad de Puerto Rico que lleva 25 años con un proyecto como este. Ahora tenemos a la UPR de Río Piedras que ha comenzado Siempre Vivas también y esperamos que, eventualmente, esté en todas las unidades del Sistema y en otras instituciones. Más que nunca, estamos confirmadas y afirmando nuestro poder y el poder de las mujeres de los grupos excluidos. Le agradecemos a la Universidad el apoyo que nos ha dado, a nuestro Departamento, al Colegio, la Rectoría y todas las unidades que están aquí, unidas para construir esos espacios de equidad para todos y todas”, puntualizó Seijo Maldonado.
La Marcha Violeta culminó en las escalinatas de la Casa Alcaldía de Mayagüez, donde las organizadoras y el alcalde de la ciudad pronunciaron mensajes de solidaridad y apoyo.
Para recibir los servicios de Siempre Vivas, pueden comunicarse a los teléfonos: (787) 832-4040, extensión 6203, o para emergencias: (787) 390-3371. También, pueden contactarles mediante correo electrónico a: siemprevivas@uprm.edu