Se convierten en Segundos Tenientes
Por Javier Valentín Feliciano (javier.valentin@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 14 de febrero de 2020
El Departamento de Ciencias Militares del Cuerpo de Adiestramiento para Oficiales de la Reserva del Ejército de los Estados Unidos (ROTC), del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), celebró su ceremonia de comisión a siete cadetes ascendidos a segundos tenientes. El evento tuvo lugar en el anfiteatro de Administración de Empresas. Algunos de ellos pertenecen a otros recintos de instituciones públicas y privadas del país.
“La actividad consiste en la comisión de estos estudiantes del ROTC que completaron sus grados en diciembre de 2019. Por otro lado, el Ejército de los Estados Unidos les exige terminar 24 créditos adicionales en cursos de ciencias militares, además del entrenamiento de campo básico y avanzado, el cual tienen que finalizar satisfactoriamente”, así lo manifestó el teniente coronel Ángel R. Ortiz, director del mencionado Departamento en el RUM.
Añadió que, algunos de ellos seguirán en sus carreras militares activos en el Ejército, mientras que otros se quedan en la reserva de Puerto Rico. A cada uno se les asigna una rama en la que tienen que servir, algunas se relacionan directamente con las carreras que estudiaron en la universidad. En cambio, algunos egresados reciben nuevos adiestramientos en las diferentes áreas.
Por su parte, la doctora Betsy Morales Caro, decana de Asuntos Académicos del RUM, expresó que este evento se realiza dos veces al año, uno en verano y otro en febrero.
“El ROTC del RUM acoge a la región oeste y parte de la norte y el sur. Traemos a los estudiantes de otras instituciones del país en los pueblos de San Germán, Aguadilla, Ponce y Arecibo. Unos permanecen en Puerto Rico y otros se mudarán fuera del país. Compartimos colaboración con el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico. Además, estamos muy orgullosos de uno de ellos, pues es graduado de nuestro Recinto”, manifestó.
Se trata del colegial Nelson J. Torres, quien se comisionó como Segundo Teniente y terminó el pasado mes de diciembre su bachillerato en Ingeniería Civil con concentración en Agrimensura y Topografía. Ahora, se mudará fuera de país para formalizar un adiestramiento en paracaidismo.
“Hace cinco años entré como cadete. Mi experiencia resultó muy positiva. Tuve que levantarme bien temprano y distribuir el tiempo en los estudios, además de cumplir con los requisitos para comisionarme. Dentro de un mes me marcho para Missouri y mi último lugar será en Italia. Ya mi mamá empezó a llorar. Además, aprendí a estar pendiente de todos los detalles y ser disciplinado”, manifestó el universitario, natural de Ponce.
Como momento emblemático, una de las universitarias cadetes se convirtió en segunda teniente, tuvo la oportunidad de que su padre, quien es Mayor del Ejército, la viera seguir sus pasos.
“Desde pequeña, cuando veía a mi papá luciendo el uniforme, yo decía que quería entrar a la milicia y ponerme uno igual. Estudié en cinco años la carrera universitaria. Yo era la única mujer del grupo, pero en el ejército no hay esa diferencia porque de manera individual somos fuertes, pero juntos somos invencibles. Es un consejo que le doy a los cadetes que tengo a mi cargo. Al principio fue difícil, pero no imposible. Y lo logré”, sostuvo Linda E. Bisbal Pérez, graduada como Enfermera de la Universidad Interamericana de Arecibo con distinción Cum Laude.
Antes de que su hija se marche a la misión encomendada, su padre, el Mayor Antonio Bisbal Cintrón, le quiso dejar tres consejos: que no abandone su fe, que siga con su disciplina militar y que nunca olvide que ella salió de una pequeña isla del Caribe, ya que en todos los países en donde irá, estará representando a Puerto Rico.
“Me siento muy orgulloso, esto ha sido una bendición que hemos recibido. No pensaba que mi hija seguiría mis pasos porque como familia militar, hemos estado en muchas guerras. Ella ha sido un tesoro para nosotros y para nuestra familia”, añadió el militar mayagüezano radicado en Missouri, quien se desempeña como analista matemático.
Como parte del evento, se les colocan los rasgos distintivos en el uniforme del militar, reciben una placa y realizan el ritual conocido como el saludo del dólar de plata, que es una tradición del ejército, en la que los recién comisionados presentan un dólar de plata al primer soldado alistado que lo saluda, el mismo puede ser un familiar, un amigo o mentor. La moneda confirma simbólicamente una señal de respeto al recibir su nuevo rango y posición.
Durante este año fiscal, el ROTC del RUM espera comisionar a alrededor de 40 cadetes; en 2019 juramentaron 45 y en 2018, 38.