Embajadora colegial parte del fuego olímpico de las Olimpiadas de Tokio
Por Mariam Ludim Rosa (mariam.ludim@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 13 de marzo de 2020
¡Un sueño hecho realidad! ¡Ahora puedo decir que soy olímpica!
Así se expresó la colegial Natalia Ramírez Irizarry, estudiante de maestría del Departamento de Ciencias Marinas (CIMA) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), sobre el gran honor de representar a Puerto Rico durante el recorrido de la llama de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, ayer jueves, 12 de marzo en la ciudad de Olimpia, en Grecia.
“¡Fue una experiencia inolvidable! Fui la penúltima en correr y eso es sumamente importante para mí, ya que fue el lugar donde comenzó el movimiento olímpico. Durante el tramo, pensaba en todo el trabajo que pasé para llegar allí y ser la primera puertorriqueña en ese prestigioso trayecto con la antorcha de los Juegos Olímpicos”, dijo Natalia a Prensa RUM, desde Atenas, Grecia.
“Creo que en los vídeos que me tomaron se notaba mi euforia, mi felicidad, con una sonrisa de oreja a oreja”, agregó la embajadora de Puerto Rico.
Natalia, quien se graduó del bachillerato de Geología en el 2015, fue atleta colegial del 2010 al 2014 en la disciplina de halterofilia. En su representación de los colores verde y blanco en la Liga Atlética Interuniversitaria (LAI), obtuvo siete medallas: cuatro de oro; tres de plata y una de bronce. Asimismo, tres subcampeonatos en los que también participó su hermana gemela Alexandra.
“Estoy bien emocionada. Representa un sueño porque desde que comencé mi carrera como atleta, quería ir a unas Olimpiadas. Ahora tuve esa gran oportunidad de representar a mi isla al portar la antorcha olímpica y correr ese tramo de 200 metros. Así que ahora puedo decir que soy olímpica”, afirmó.
La joven lajeña, exintegrante de la selección nacional y egresada de la Escuela Especializada en Deportes Eugenio Guerra Cruz (Ecedao), del Albergue Olímpico, participó el año pasado en la décimo sexta sesión de la Asociación de Participantes de la Academia Olímpica Internacional (Ioapa) en Olimpia, Grecia.
Allí, presentó su proyecto Los valores olímpicos como herramienta importante para promover el movimiento olímpico en estudiantes de Puerto Rico y, durante la reunión, los organizadores hicieron un sorteo de tres cupos para hacer uno de los relevos de la antorcha para Tokio 2020.
Por su parte, Ray Quiñones, director atlético del RUM, felicitó a la joven por esta gesta.
“Nos sentimos muy orgullosos de que Natalia, quien representó con gallardía los colores verde y blanco del Colegio, haya tenido esta magnífica oportunidad. Sin duda, un honor inmenso. Personalmente, tuve la experiencia de participar, como atleta, en las Olimpiadas en Seúl, en 1988, y puedo dar fe de que se trata de una vivencia única. Cuando inicien la Olimpiadas en Tokio y se encienda el pebetero, una colegial será parte de ese fuego olímpico. ¡Enhorabuena!”, indicó.