Knowledge is power. Information is power. The secreting or hoarding of knowledge or information
may be an act of tyranny camouflaged as humility.
– Robin Morgan
Durante nuestro paso por la universidad, ya sea mientras nos formamos académicamente, laboramos como profesores o desde nuestras labores administrativas, nos topamos con figuras que de una manera u otra han impactado positivamente el quehacer académico y el entorno universitario, trascendiendo los límites del aula, la oficina y el laboratorio. El doctor José A. Mari Mut es una de ellas. Quien le haya conocido alguna vez puede afirmar sin vacilación que se trata de un académico polifacético de gran calibre, lo que queda evidenciado en su extensa producción académica.
El doctor Mari Mut nació y se crio en el pueblo de Mayagüez. Durante su segundo año de escuela superior, surgió su interés por la biología, por lo que, en los años 70, ingresó a la Universidad de Puerto Rico en esta misma ciudad para completar un bachillerato en Zoología.
“En la universidad, se me dificultó decidir entre botánica y zoología, por lo que tomé cursos en ambas disciplinas. Me decidí por la zoología en el tercer año cuando tomé el curso de Entomología con el Dr. George Miskimen.”
Eventualmente, obtuvo un grado doctoral en Entomología de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign. Sin embargo, su interés por la botánica “permaneció latente y germinó décadas después con los trabajos sobre la flora del Recinto y el de la flores de Puerto Rico”.
De vuelta al Recinto, impartió sus conocimientos como profesor en el Departamento de Biología por 35 años, donde fungió también como director. Aquí, se desempeñó además como Director de la Oficina de Publicaciones de la Facultad de Artes y Ciencias, Director de la Oficina de Estudios Graduados y Director de la Biblioteca General. Por doce años, fue editor del Caribbean Journal of Science, revista científica de nuestra facultad.
Luego de haberse especializado en un grupo de insectos por 15 años, comenzó a evolucionar su interés por otras disciplinas y actividades no tan especializadas y complejas como la que había estado estudiando. Uno de esos primeros intereses fue la ebanistería, pasatiempo que lo condujo a escribir Maderas de Puerto Rico ante el deseo de poder identificar los árboles de donde sacaba la madera para trabajar. Este libro ha servido de gran herramienta para los artesanos y las artesanas del país.
Del mismo modo, comenzó a investigar, escribir y publicar sobre otros temas que le parecían relevantes. Ya sea sobre los primeros faros de Puerto Rico y otras estructuras históricas, las aves y los árboles en nuestro Recinto, las flores y las frutas del país o la redacción científica, el doctor Mari Mut ha compartido todo el cocimiento que ha adquirido y descubierto a través de los años; pero lo admirable de esto es cómo lo ha hecho.
Precisamente, por esta razón, hemos aprovechado este espacio para destacar y reconocer su aportación magnánima al conocimiento científico e histórico del país.
Varias experiencias a principios de los 90, como las gestiones difíciles de publicar un libro impreso y conocer por primera vez acerca del world wide web (www) y la Internet, motivaron al doctor Mari Mut a tomar la decisión de no volver a publicar en papel. Para entonces, ya había acceso a Internet en el Recinto, pero señala que todo era texto, sin imágenes. Con la llegada de Netscape (primer navegador gráfico) poco tiempo después, aseguró haberse dado cuenta, muy claramente, “por dónde iba la parte de publicación académica”.
Con este conocimiento, creó la primera página web del Caribbean Journal of Science y de la Oficina de Estudios Graduados. También, comenzó el proyecto que establecía la entrega de tesis en formato pdf para que luego fueran publicadas en Internet y dictó el primer curso en línea en el Recinto (BIOL 6689 – Métodos de Investigación en Biología).
La decisión de no publicar en papel se fue fortaleciendo con cada proyecto que realizaba porque veía “el potencial de poder llegar a todo el mundo que tuviera acceso al Internet”, más aún cuando comenzaba a hacerse evidente que la mayoría de las personas tendrían acceso a este, especialmente en la universidad. Desde entonces, continuó trabajando todo en línea.
Uno de sus primeros trabajos, el Manual de Redacción Científica, surgió mientras dictaba un curso de preparación y publicación de artículos científicos. Comenzó a reunir las notas del curso hasta convertirlo en el texto –todavía hoy muy popular entre la comunidad científica y estudiantil de Puerto Rico y otros países– que luego publicó a través del servidor de Internet de la universidad que para entonces se encontraba en Ingeniería Eléctrica. El Manual de Redacción Científica va dirigido a estudiantes y profesionales que se han emprendido como investigadores, “específicamente para ayudarte a redactar y publicar los resultados de tus investigaciones. Con un conocimiento práctico del tema lograrás que tus artículos sean aceptados y publicados con pocos cambios y correcciones”, promete la introducción del manual.
Las publicaciones en línea son mucho más convenientes para el doctor Mari Mut por su acceso universal y porque posee control de sus trabajos; puede actualizarlos cuando quiera y corregir errores rápida y fácilmente en comparación a si se publican en papel. Árboles y palmas del Recinto Universitario de Mayagüez, evidencia de su interés por la historia natural y la valorización de nuestra universidad, es ejemplo de esto. Inicialmente, solo abarcaba los árboles de la universidad, pero la actualización del contenido y del título de la publicación, que incluye 164 especies de árboles y 34 especies de palmas, recalcó, la pudo hacer sin mayor dificultad.
Así mismo, ha llegado a publicar decenas de libros sobre flora, fauna, arquitectura y otros temas en Internet sin prestarle mucha importancia a sus derechos como autor. Al doctor Mari Mut no le incomoda que las personas utilicen sus trabajos y fotografías siempre y cuando sea para propósitos educativos. Como afirma,
en una visión más amplia, es conocimiento… y el conocimiento debe estar libre, a la disposición de todo el mundo”.
El mayor provecho que el doctor Mari Mut obtiene de sus excelentes y diversos trabajos es la satisfacción de compartirlos con quien desee conocer más de estos temas, y la concretización de esta visión es el proyecto académico en la web Ediciones Digitales.
En la página (edicionesdigitales.info), que recibe más de 30 mil visitas al mes de personas de todo el mundo, se puntualiza que el propósito de este proyecto es compartir conocimiento y que “la única compensación aceptada por el contenido que aquí se ofrece es la satisfacción de saber que la información es bien recibida y de utilidad para el lector”. En otras palabras, convenientemente, los comparte de manera gratuita. Todos los trabajos contenidos en este proyecto pueden disfrutarse en línea o ser descargados, sin ningún cargo, en formato pdf o como iBook.
Aquí, puede encontrar los trabajos antes mencionados, otros en colaboración con personas como el señor José R. Almodóvar Rivera, fotógrafo y microscopista del Centro de Microscopía del Departamento de Biología del RUM (en Animales y plantas con historias), y trabajos de historia general y natural en la sección Biblioteca, todos libres de costo para ser utilizados con fines educativos.
¿Es esta la misión de vida del doctor Mari Mut: compartir todo el conocimiento adquirido a través de los años sin esperar nada a cambio?
En respuesta, el doctor Mari Mut expresó no recordar a su padre o a su madre, ambos trabajadores, enfatizar la importancia de tener mucho dinero. Para él, la prioridad es otra.
Yo nunca vi razón para tener mucho más de lo que tenía. Me parecía prioridad que mis trabajos los viera todo el que quisiera verlos, que llegaran a más personas. Por eso, todos están gratis. Yo nunca he vendido ninguno, ni me ha interesado hacerlo.”
De haber publicado sus trabajos en papel, “aquí se quedaban”, insistió; no tendrían el alcance internacional que hoy día tienen. Al presente, como jubilado, continúa esta labor distribuyendo por las bibliotecas de la Isla DVDs que contienen todos sus trabajos para que sean incluidos en catálogos digitales y más personas puedan disfrutarlos.
Aunque no planifica continuar produciendo trabajos académicos de este tipo, asegura trabajar en la actualización de los ya publicados, como es el caso de Flores de Puerto Rico que realizó en colaboración con el doctor Miguel A. Vives Heyliger. A dos años de su jubilación, ha fotografiado flores que no se encuentran en la compilación actual.
La curiosidad y el espíritu investigativo, colectivista y desinteresado del doctor José A. Mari Mut le han permitido conocer mucho sobre muchos temas y, sin duda alguna, vivir experiencias gratas. Su visión amplia de lo que es el conocimiento queda constatada en su compromiso por investigar y luego difundir, de manera práctica y efectiva, todo lo que con gran esfuerzo y pasión ha descubierto, todo el conocimiento que ha estado a su alcance. Como consecuencia, nos contagia con el interés de conocer y valorar más nuestro entorno, lo que nos caracteriza como individuos en nuestros espacios y tareas particulares y como puertorriqueños.
Solo nos resta añadir que la Facultad de Artes y Ciencias agradece profunda y humildemente al doctor José A. Mari Mut por su compromiso con el conocimiento y por largos años de continua colaboración.
El doctor Mari Mut ha publicado decenas de artículos científicos y de temas variados y dos libros impresos. Durante su carrera académica, realizó viajes de estudio a países como Venezuela, México, República Dominicana, Estados Unidos, España, Francia y Bélgica.
Por Cynthia Maldonado Arroyo