Se adiestra como veterinaria en Tailandia
Por Rebecca Carrero Figueroa (rebecca.carrero@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 7 de septiembre de 2018
Son casi 16 mil kilómetros los que separan a Puerto Rico de Tailandia. Después de casi 20 horas de vuelo, Alexandra Nicole Ruiz Justiniano, estudiante del Departamento de Ciencia Animal del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), llegó hasta la ciudad de Chiang Mai, para trabajar voluntariamente en un santuario de animales.
Su estadía en el continente asiático se extendió durante 15 días, gracias a la organización Loop-Abroad que se encarga de ofrecer experiencias de trabajo en ese campo, para un selecto y reducido grupo de estudiantes.
“Mi pasión siempre han sido los animales. Tuve que enfrentarme a muchos temores para ir tras mi sueño de estudiar Veterinaria. Pensaba que no era lo suficientemente inteligente para lograrlo, hasta que me cambié del Departamento de Psicología al de Ciencia Animal”, expresó Alexandra.
Mientras estuvo en la Facultad de Artes y Ciencias, la mayagüezana tuvo la oportunidad de tomar como electiva el curso básico de INPE y ahí, fue que retomó su sueño de diversificar su rumbo académico hacia el estudio, la prevención y cura de las enfermedades de estos.
“La experiencia fue fascinante y me abrió los ojos para entender que esto es lo que tengo que hacer. Ese mismo semestre, inicié los trámites para trasladarme y tan pronto me aceptaron, desde verano comencé a tomar los cursos que me faltaban y de ahí en adelante, he seguido. Una de mis inseguridades al cambiarme a Ciencia Animal era que no me había expuesto anteriormente al campo”, indicó.
Así fue que se integró como voluntaria a la Feria Agrícola Educativa Cinco Días con Nuestra Tierra. Sin pensarlo, este fue su ensayo de lo que realizaría en el reino tailandés, ya que se ocupó de limpiar las jaulas y atender a los animales a su cargo. Esta vivencia le animó a ir tras otras oportunidades similares.
“Quería hacer investigación y trabajar con veterinarios. Como requieren que se haya trabajado previamente, busqué internados para solicitar, hasta que di con Loop-Abroad, donde completé 80 horas de trabajo bajo la supervisión de un veterinario y aplicamos bastantes técnicas y procedimientos”, sostuvo la alumna.
El programa cuenta con distintas localidades alrededor del mundo. Sin embargo, debido a la preferencia de Alexandra por los paquidermos, debía escoger entre Tailandia o Australia. Su estadía en el país asiático se dividió durante una semana de labores con mascotas domésticas, mientras que la segunda, la expuso al trabajo con elefantes.
“Los primeros siete días, esterilizamos perros y gatos. Trabajamos no solo con veterinarios de Estados Unidos, sino también de Tailandia. Luego, en parejas, nos ocupamos de velar la dieta de los elefantes- a base de hojas de maíz, guineo y melón- en lo que se conoce como el Diet Day. Observamos cómo comían y atendimos su comportamiento. También tomamos muestras de orina y de heces fecales para evaluar su estructura de acuerdo a la edad del elefante. El mío tenía 75 años, que más o menos es lo que ellos duran, de 60 a 75 años”, describió.
Según describió la colegial, muchos de los elefantes del santuario estaban heridos y lastimados. Estos paquidermos han sido rescatados de prácticas como el excursionismo o programas de reproducción, por lo que han sido víctimas de abuso y han sufrido lesiones crónicas y hasta ceguera. En el lugar reciben el cuidado de voluntarios de distintas partes del mundo, que les limpian las heridas y les proveen el cuidado para atenderles ante el maltrato físico que sufrieron durante sus entrenamientos.
“Es impresionante ver las condiciones extremas a las que los exponen, incluso, el privarlos de alimento. Por eso, muchos padecen del síndrome de estrés postraumático y tienen que permanecer aislados del resto de la población. Eso es lo que llaman los tailandeses: ‘romperle el espíritu al elefante’ ”, precisó.
Además de confirmar sus intereses académicos, la exposición a la cultura, y al ambiente tailandeses, son aspectos que atesora de la travesía.
“Esta ha sido la mejor experiencia de mi vida. Me he dado cuenta de que todo es posible. El clima tropical y la amabilidad de la gente, me hicieron sentir en casa”, afirmó.
De otra parte, la directora del programa Loop-Abroad, Jane Stine elogió la labor de Alexandra y de sus compañeros mediante un comunicado de prensa.
“Nuestros estudiantes son algunas de las personas más increíbles que he conocido. Son dadivosos, compasivos, dedicados y buenos trabajadores con grandes metas y con el deseo de lograr un gran impacto. Es increíble contemplar cuánto quieren aprender y retarse a sí mismos. Durante estos nueve años, les hemos visto hacer cosas maravillosas”, aseguró Stine.
Loop Abroad cuenta con programas en ciencia animal, biología marina y veterinaria para universitarios y jóvenes de 14 a 30 años y ofrece ayuda económica y asistencia en recaudación de fondos. Los programas varían de dos semanas en el verano hasta un semestre completo de estudios, y cuentan con la opción de que reciban créditos académicos. Los interesados, deben solicitar a través de: www.loopabroad.com.