Agricultoras aprenden conocimientos de vanguardia
Por Javier Valentín Feliciano (javier.valentin@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 4 de octubre de 2024
El Centro Empresarial para la Mujer en la Agricultura (CEMA), adscrito al Colegio de Ciencias Agrícolas (CCA) del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), ofrece este semestre un curso dirigido a un grupo de 25 agricultoras con el propósito de fomentar una práctica más sostenible. Además, se les adiestra a través de talleres y presentaciones sobre cómo mejorar sus agronegocios dentro de los parámetros cónsonos con la naturaleza.
“A través de este ofrecimiento de economía sostenible, queremos que las agricultoras aprendan sobre manejo, producción y mercadeo del producto, que ellas siembren ahora y perpetúen para generaciones por venir. Además, que conserven los recursos naturales. Muchas de ellas son agricultoras y tienen un negocio exitoso, mientras otras están todavía comenzando, o estableciendo su plan de negocio y explorando aquello que más les conviene. También, tenemos un grupo de estudiantes universitarios que toma estos talleres como un curso con crédito”, manifestó la doctora Gladys González Martínez, catedrática jubilada del CCA y profesora emérita, a cargo de la iniciativa.
Dentro de la oferta educativa, las participantes formaron parte del curso Fundamentos de Producción de Pecuarios, para adquirir nuevos conocimientos sobre el manejo indicado de las especies y el bienestar animal.
“Es un tema amplio con unos pilares esenciales de lo que sería el cuidado, nutrición, reproducción y nuestra responsabilidad ética y moral, cuando trabajamos con cualquier animal. A pesar de que diferentes especies presentan diversos panoramas de producción, siempre existen unos fundamentos que son esenciales y no importa si estamos trabajando con un animal cuyo fin es producción de carne o de leche. Necesitamos asegurarnos de que el ambiente que le proveemos es el más propicio para que esa expresión genética pueda ocurrir. Esos principios aplican si es un cerdito, si son vacas lecheras o es ganado de carne”, expresó la profesora Katherine Domenech Pérez, investigadora y profesora del Departamento de Ciencia Animal de la Estación Experimental Agrícola (EEA).
El CEMA se estableció promoviendo los postulados de inclusión y perspectiva de género. Como dato interesante, este año participó el agricultor Ángel Morales, quien quiso formar parte de esta iniciativa cuando vio la promoción en las redes, ya que recientemente adquirió una finca en el municipio de Rincón.
“Quería aprender acerca de los procesos del desarrollo de la finca, qué se debe hacer y cómo cosechar los cultivos. Me interesaron los temas que se están ofreciendo en el programa. Hace un año que estoy empezando como agricultor y la finca se renovó en óptimas condiciones. Se sembraron plátanos y hay muchos árboles frutales, de pana, aguacate, ya tengo todo. Quiero empezar a producir porque yo quiero sembrar para mí y lo que sobre, que se pueda vender. En especial, el área de Rincón que es una zona turística con muchos visitantes y restaurantes. Puedo producir los plátanos, las panas y venderlas”, indicó el veterano retirado del Ejército de los Estados Unidos.
Asimismo, la agricultora y apicultora Lillian Marrero Huertas posee una finca y se matriculó en CEMA para conocer más sobre este campo tan innovador. Además, es propietaria de la agroempresa Bee Connected Inc. ubicada en Coamo, un proyecto agroecológico para personas con diversidad sensorial.
“Vi la promoción del CEMA en las redes sociales y de inmediato me interesó. Fui maestra de inglés por 28 años en todos los niveles académicos y siempre me ha gustado la tierra. Trabajaba con familiares y esa pasión por la agricultura siempre se ha mantenido. Terminé mis años como maestra y ahora me dedico a lo que realmente me gusta. Estudié en la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras. Quise ser agrónoma desde pequeña y me quedé con esa meta de ejercer y ahora no lo ejerzo como agrónoma, pero sí lo aplico a la tierra”, destacó.
El Centro ha impactado directamente a más de 700 agricultoras, incluyendo al personal de Departamento de Agricultura de Puerto Rico, que practican todo lo aprendido durante el semestre que divulgan y utilizan en sus comunidades.