RUM recibe subvención del NEH para establecer Laboratorio de Historia Oral
Por Idem Osorio De Jesús (idem.osorio@uprm.edu)
Prensa RUM
viernes, 10 de diciembre de 2021
El Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) contará con un Laboratorio de Historia Oral, primero en su categoría en Puerto Rico, tras recibir una subvención de $500 mil del National Endowment for the Humanities (NEH) y su programa Sustentando las Humanidades a través del Plan de Rescate Estadounidense (SHARP, por sus siglas en inglés). El espacio multidisciplinario estará dedicado a preservar y compartir historias sobre el país, cuya difusión se hará mediante un archivo digital e incluirá exhibiciones y documentales.
Así lo dio a conocer el equipo investigativo a cargo del proyecto, compuesto por: las doctoras Ricia Anne Chansky, directora de la iniciativa; y Mary Leonard, quien coordina el Certificado de Cine, ambas del Departamento de Inglés; así como la profesora Jaquelina E. Álvarez, de la Biblioteca General. En entrevista con Foro Colegial, las catedráticas explicaron que su propuesta Escuchando a Puerto Rico: La promesa de la historia oral en y más allá de la Universidad, une los esfuerzos de las tres unidades académicas que representan para la creación de este Laboratorio, que estará ubicado en la Biblioteca General del RUM, pero además contará con una versión virtual.
“Luego del azote del ciclón María en el archipiélago puertorriqueño, desarrollé el proyecto Mi María, Puerto Rico después del Huracán, en el que participaron sobre 100 estudiantes subgraduados de nuestro campus, de todas las disciplinas, quienes recibieron adiestramiento en los aspectos éticos de recolección, transcripción y traducción de historias orales de sobrevivientes puertorriqueños. El Decanato de Artes y Ciencias fue bien solidario con ese proyecto, al punto que, en un momento, auscultaron conmigo la posibilidad de tener algún equipo de respuesta, en el cual los estudiantes siempre pudieran ayudar a la ciudadanía boricua. Quedé bien impactada y sorprendida con la petición, y me pregunté cómo podría lograr esa encomienda”, recordó la doctora Chansky.
La catedrática agregó que, casualmente, sus colegas Leonard y Álvarez la contactaron para expresarles su interés en desarrollar algunos proyectos que involucraran las historias orales y los archivos digitales en la Biblioteca y otro parecido, pero enfocado en el cine.
“Cuando vimos la convocatoria para este incentivo, parecía una maravillosa oportunidad de juntar tres programas bien dinámicos del Recinto, trabajar unidas para brindar oportunidades de aprendizaje activo a los estudiantes y comprometernos a ayudar y escuchar a la gente de Puerto Rico y asegurarnos de que sus historias sean diseminadas”, aseveró Chansky.
Precisamente, el proyecto está específicamente diseñado para convertirse en una unidad activa con el propósito de recopilar investigaciones basadas en la comunidad y colaborar con organizaciones comunitarias, así como grupos de ayuda mutua y propuestas científicas ciudadanas, enfocadas en las disciplinas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, conocidas como STEM.
Un aspecto importante del esfuerzo es la creación de nuevos cursos de historia oral y realización de cine documental que se ofrecerán en línea, a través del Departamento de Inglés y la División de Educación Continua y Estudios Profesionales (DECEP), a partir de enero de 2022, los cuales están disponibles para estudiantes de cualquier disciplina y campus de la Universidad de Puerto Rico (UPR).
“Uno de los propósitos de este incentivo que se otorga como parte del American Recovery Act, es fortalecer programas e iniciativas en universidades que han sido amenazadas o han tenido problemas ocasionados por la pandemia y por otras catástrofes como las que hemos enfrentado. Pensamos que, como Chansky está muy organizada y enfocada en narrar las historias de la gente en Puerto Rico, plasmarlas en un documental también cumpliría con ese objetivo. Quisiera apoyar eso y, por supuesto, a mis estudiantes de cine e insertarlos en ese proceso de hacer cine de esta forma, que es, realmente, relevante en nuestro entorno puertorriqueño”, aseguró, la doctora Leonard.
La directora del Certificado de Cine en el RUM explicó que a raíz de las coincidencias entre ambos proyectos, quiso aportar a la gesta desde el séptimo arte.
“Nuestra meta es trabajar con los estudiantes que están grabando historias orales, para moldear algunas de esas historias, usando el lenguaje visual, auditivo, editando, condensando y creando. Esperamos contar con documentales supervisados por cineastas profesionales, pero integrando a nuestros alumnos para lograr un producto de alta calidad, que podamos compartir a través de la Biblioteca y el Laboratorio”, subrayó Leonard, al tiempo que explicó que los primeros dos cursos que se ofrecerán son: Introducción al Documental y Producción de Cine, el Documental Creativo.
Por su parte, la profesora Álvarez reiteró que su participación en representación de la Biblioteca General surgió de la aspiración de preservar las historias orales que se estaban recopilando y proveer acceso a esos documentos de manera adecuada.
“Después de María, cuando estábamos tratando de guardar y preservar todo el material, nos percatamos que no teníamos el peritaje para hacer ese trabajo, y surgió esta idea de desarrollar una infraestructura física, humana y digital para poder, realmente, guardar esas voces para las siguientes generaciones. El equipo de trabajo del Graduate Research and Innovation Center (GRIC), integrado por los profesores José Morales Benítez y Grisel Rodríguez, así como la doctora Anidza Valentín, que somos los que trabajamos el repositorio institucional de la UPR, nos unimos a Chansky y a Leonard para comenzar esta conversación”.
Según abundó, de ese ejercicio identificaron que cuentan con una base dispersa de material y equipo en distintos edificios del campus y es cuando la Biblioteca se inserta en su rol fundamental de conservación.
“Una parte importante de los fondos, será destinada a crear ese espacio físico donde se combinen los equipos con los que se cuenta en el Recinto. El espacio virtual, como ya se mencionó, es preservar, guardar y hacer accesible todo este material a la comunidad y al mundo entero. Entonces, es bien importante que tengamos los recursos y los bibliotecarios adiestrados para proveer esos servicios y para poder manejar esos materiales. Por lo tanto, con esta propuesta, vamos a estar adquiriendo una infraestructura que crece o aumenta lo que ya tenemos, y que nos ayuda a tener disponible el repositorio institucional con los datos de la UPR”.
De hecho, precisó que parte del esfuerzo incluirá la contratación de Carol Hill, una archivera puertorriqueña que vive en Estados Unidos, experta en preservación y curación de estos materiales audiovisuales digitales.
“Lo que estamos haciendo, es utilizar esta subvención de medio millón en un año, que es una buena suma de dinero, para poder elevar nuestra infraestructura, recursos humanos y cursos y, realmente, estar preparados para hacer otros proyectos de humanidades digitales”, abundó Álvarez.
Al equipo de liderazgo en el RUM se unen los colaboradores Marci Denesiuk, una escritora creativa canadiense; los bibliotecarios Morales Benítez y Rodríguez; asimismo, los cineastas galardonados Guillermo Gómez Álvarez y Raisa Bonnet Ocasio, a cargo de los cursos.
Según se esboza en el comunicado oficial de la subvención, el Plan de Rescate Estadounidense reconoce al sector cultural y educativo, como componentes esenciales de la economía y la vida cívica vitales para la salud y la resiliencia de las comunidades. Es por esta razón, que estos fondos brindarán un sustento a las universidades, museos, bibliotecas, archivos, sitios históricos y sociedades del país, para conservar plazas de trabajo relacionadas con las humanidades, en riesgo por la pandemia.
En esta ocasión, el NEH otorgó más de 24 millones a través del programa SHARP y anunció que, de las 937 solicitudes elegibles recibidas, solo se financiaron 292 proyectos sobre temas de las humanidades en toda la nación estadounidense. El proyecto de la UPRM es uno de los tres financiados en Puerto Rico y uno de los pocos en recibir el total de $ 500 mil. El anuncio oficial se encuentra en el siguiente enlace del National Endowment for Humanities.