Décimo Final Feliz al son de bomba
Por Mariam Ludim Rosa Velez (mariam.ludim@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 20 de mayo de 2022
Al son de la bomba puertorriqueña, el colectivo Come Colegial del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), llevó a cabo su décima edición de Final Feliz. En el ya tradicional evento de cierre de semestre se repartieron 100 almuerzos para los estudiantes.
“Ha sido un semestre y un año académico bien arduo. Vinimos arrastrando todavía la pandemia, los sismos y muchas vicisitudes, pero, al mismo tiempo, hemos trabajado duro para cumplir nuestra misión de que ningún estudiante se quede sin alimentos. Siempre estamos buscando ayudas para suplir las compras de alimentos y servir almuerzos a los colegiales. Hemos tenido un gran apoyo, tanto de la comunidad universitaria como de organizaciones”, expresó Lucy Serrano Gastón, consejera de Come Colegial.
En esta ocasión, donaron los almuerzos las asociaciones estudiantiles Phi Lambda Upsilon y American Nuclear Society UPRM Student Section.
“Mucha gente no lo sabe, pero realmente existen estudiantes en el Colegio que sufren de necesidades económicas y de hambre. Nosotros queremos evitar que tengan que decidir entre pagar una clase y comer. Así que estamos ayudando a que puedan culminar sus estudios, sin importar de dónde vienen y de su estatus socioeconómico”, sostuvo Desiré Rivera Borges, estudiante de Ingeniería Química, quien es vicepresidenta de Come Colegial y la American Nuclear Society.
Por su parte, Estela María Cruz García, estudiante de Microbiología Industrial y relacionista de Come Colegial, agradeció la colaboración de quienes respaldan esta noble misión.
“A pesar de algunas interrupciones, tenemos que estar sumamente agradecidos, ya que varias asociaciones y compañías han colaborado con nosotros. Podemos decir que nunca nos ha faltado nada y que todo el tiempo, en ambos semestres, hemos podido continuar trabajando para cumplir con nuestros objetivos”, indicó.
Primera Feria Agroartesanal
Previo al Final Feliz, Come Colegial celebró con éxito la Primera Feria Agroartesanal que reunió a una veintena de microempresarios y artesanos.
“Ha sido un semestre duro, de muchísimo trabajo, pero creo que hemos hecho un excelente trabajo ayudando a nuestra comunidad. Uno de los mayores logros fue la primera Feria, aquí en la misma placita de Chardón. Fue un éxito para los estudiantes emprendedores que tienen negocios pequeños, y también continuamos las iniciativas de proveer compras de alimentos a estudiantes necesitados y almuerzos gratuitos a la comunidad estudiantil”, explicó Desiré.
Por su parte, la Consejera del colectivo agregó que ante la buena acogida del evento se planifica repetir dos veces por semestre.
“Tuvimos la colaboración de los productos Mi Finca y Maga, que siempre nos donan alimentos para nuestros estudiantes. Igualmente, repartimos productos que tenemos en excedente. La Feria Agroartesanal transcurrió de manera excelente”, aseguró Serrano Gastón.
Ambas actividades fueron amenizadas por la agrupación Huellas de Tambor, colectivo musical compuesto por estudiantes del RUM, cuyo fin es resaltar las raíces de la bomba puertorriqueña, género musical considerado como la primera música autóctona de la isla. Tras concluir la repartición de alimentos, el grupo ofreció un ameno taller en el que explicaron los pasos básicos de baile del género.