Del Colegio al espacio: Un logro histórico en el Día de π
Por Mariam Ludim Rosa Vélez (mariam.ludim@upr.edu)
Prensa RUM
viernes, 21 de marzo de 2025
El 3.14 o π (pi), día emblemático de la ciencia, coincidió con el histórico lanzamiento de la misión NASA’s SpaceX Crew-10, en la que viajó una innovadora tecnología de purificación de agua desarrollada en el Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR). Además, la misión captó la atención mundial al facilitar el esperado regreso de los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams, quienes permanecieron en la Estación Espacial Internacional (ISS) durante nueve meses, debido a problemas técnicos que retrasaron su retorno.
Para el doctor David Suleiman Rosado, director y catedrático del Departamento de Ingeniería Química del RUM, autor, junto a sus estudiantes, del novel proyecto diseñado para optimizar el uso del agua en el espacio, presenciar el despegue de la nave desde el Centro Espacial Kennedy fue una experiencia inolvidable.
“¡Simplemente no lo podía creer! Al ver a ese cohete elevarse, sentía que el tiempo se detenía y que estaba viviendo un sueño espectacular”, relató.
Uno de los aspectos que más lo sorprendió fue el regreso del booster, ya que “se separa del cohete y va en caída libre, y en un momento no muy lejano del piso, vuelve a prender y automáticamente va a una plataforma y se estaciona. Eso es lo más impresionante, porque se escucha ese fuerte estruendo de haber roto la barrera del sonido”, narró.
El proceso no estuvo exento de desafíos. Días antes, el 12 de marzo, en un primer intento, el lanzamiento fue cancelado.
“Nos llevan a una conferencia de prensa donde están explicando todo lo que va a ocurrir. Mientras nos hablaban de los detalles, ya estaba recibiendo mensajes de personas que nos estaban diciendo: ‘Lo cancelaron’. No fue hasta el final que nos dijeron y nos explicaron las razones”, compartió Suleiman Rosado.
No obstante, la espera valió la pena. No solo se logró el lanzamiento, sino que ocurrió el 14 de marzo, cuando se conmemora un gran simbolismo para el mundo científico.
“Se dio en el 3.14, que es el día de π (pi) y realmente tiene un significado matemático. Además, es la fecha del nacimiento de Albert Einstein y del fallecimiento de Stephen Hawking, dos grandes científicos que cambiaron el mundo”, sostuvo el catedrático, quien vivió la experiencia junto a su alumno, el ingeniero Juan Camilo Rivera Díaz, candidato doctoral de INQU; y el rector Agustín Rullán Toro.
Para el equipo del RUM, el impacto de esta experiencia va más allá del logro técnico.
“Nuestra vida era diferente antes de esto. La forma en que vemos las posibilidades, en que miramos todo, ha cambiado. Los sueños se hacen realidad. Trabajando fuerte, con mucha dedicación y enfoque, se pueden lograr grandes cosas”, puntualizó.
El investigador destacó que este hito representa un éxito colectivo.
“Esto no es solo un logro personal o de nuestro equipo, sino de toda la comunidad universitaria, de Puerto Rico y del mundo académico. Nos demuestra que, sin importar de dónde vengamos, si hay pasión y compromiso, podemos aportar al futuro de la humanidad”, enfatizó.
Agregó que los experimentos iniciaron casi de inmediato tras la llegada de la tripulación a la ISS. La tecnología desarrollada en el RUM fue sometida a pruebas rigurosas y en apenas unos días, ya estaba de regreso en la Tierra.
“Nos habían explicado que recibiríamos los cartuchos como parte del cargo enviado con suministros, lo que podía tardar 10 días adicionales. Pero llegaron mucho más rápido, junto con los astronautas. ¡Es increíble! Esa rapidez también es impresionante. Lo que normalmente tomaría semanas o meses en otros contextos, aquí se mueve con una precisión extraordinaria. Realmente cambia nuestra perspectiva sobre cómo se hacen las cosas en el espacio”, dijo.
Añadió que los cartuchos se encuentran en el Centro Espacial Kennedy para realizar pruebas adicionales antes de ser enviados a Mayagüez, donde el equipo del RUM continuará con los análisis químicos y de membranas.
“Cada paso es importante porque, más allá de este experimento, estamos sentando bases para futuras investigaciones. Lo que aprendamos hoy abrirá puertas para nuevas aplicaciones en exploración espacial y en la Tierra”, subrayó.
El proyecto, titulado Ensamblaje de membranas nanoestructuradas poliméricas para la purificación de agua en la Estación Espacial Internacional, es el segundo experimento creado en el RUM que viaja al espacio. La tecnología, que se ha estudiado y mejorado a lo largo de años, fue inicialmente creada con fondos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA). Su transición a misiones espaciales está financiada por el Fideicomiso para Ciencia, Tecnología e Investigación de Puerto Rico, como parte de su Programa Avanzado de Subvenciones para Investigación: Edición Espacial, y cuenta con el apoyo de Rhodium Scientific, proveedor de servicios comerciales de la ISS para misiones de biotecnología.
Más allá del magnífico logro, al educador le llena de satisfacción poder compartir un mensaje de posibilidad para las próximas generaciones de científicos. “Nosotros tenemos un potencial extraordinario para alcanzar metas. Muy temprano aprendí que la motivación más importante tiene que salir de adentro de uno. Obviamente, siempre es lindo cuando alguien nos ayuda o nos inspira, pero al final del día, cada uno de nosotros tiene que creer en sí mismo”, reflexionó.
Para él, esa autoconfianza es clave para alcanzar cualquier meta. “Debemos creer que, con determinación, esfuerzo y el máximo de nuestras capacidades, podemos lograr grandes cosas. No tiene que ser en el espacio. Existen muchos retos en el mundo y oportunidades para hacer mejoras, aportar y crear un impacto positivo en la sociedad”, expresó.
“La ciencia es un mecanismo maravilloso porque, al final del día, se ven los resultados. Si uno puede entenderla, se logran explicaciones y quizá, hasta diseñar mejores sistemas. En mi caso, siempre ha sido mi pasión y cada uno de nosotros tiene que encontrar esa pasión y tratar de ver cómo la usamos para el servicio de la sociedad, que realmente tiene retos enormes”, concluyó.